DE MUJERES. Entre las mujeres está muy normalizado el uso de tampones, sin embargo, al igual que hay personas que agradecen su labor, otras lo odian.
En esta ocasión explicaremos las ventajas y desventajas de usar tampones.
VENTAJAS:
1. Olvídate de las manchas
Una de las grandes ventajas de los tampones es que el riesgo de mancharse es casi nulo. A diferencia las compresas, sobre todo las hechas en casa los tampones son más eficientes al contener el flujo sanguíneo.
Existen tres tamaños diferentes de tampones, entonces, debes elegir el adecuado para ti según el flujo que tengas normalmente.
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2. Son más discretos de llevar
Una ventaja de los tampones es su tamaño, por esa razón, es más fácil cargarlos, pues son pequeños y discretos. Eso sí, es importante mantenerlos en su envoltorio.
3. Sin irritaciones
A diferencia las toallas femeninas, los tampones no causan irritación.
4. No hay mal olor
Los tampones evitan el mal olor que causa el flujo menstrual. Una vez que la sangre sale y se acumula en una compresa, la combinación de la fragancia de esta y el olor natural de la sangre provoca un mal olor característico.
Con los tampones esto no ocurre debido a que toda la sangre es absorbida.
5. Puedes nadar
Con las toallas femeninas no es buena idea meterse a la piscina. En cambio, con un tapón, esto no supone ningún problema.
DESVENTAJAS
1. El tiempo adecuado en cada caso
Mantener el tampón en la vagina durante más de ocho horas es un riesgo muy alto que no se debe correr. Además del síndrome de ‘shock tóxico’, puede ocasionarse otras infecciones. También mancha la ropa y causar molestias.
2. Infecciones
Las mujeres con tendencia a sufrir infecciones del tracto urinario no deben utilizar tampones, porque aumenta los riesgos de repetir los episodios de infección. Aquellas que han recibido tratamiento tópico en la zona íntima tampoco deben usarlos.
Lo ideal en estos casos es esperar un período considerable. La vaginitis es otra desagradable patología que puede recrudecerse con el uso de tampones.
3. Resequedad vaginal
Los tampones tienen como función absorber el flujo menstrual. Con ese objetivo se ofrecen en el mercado presentaciones con distinta capacidad de absorción. Si se equivoca en la selección, se incrementan los riesgos de resequedad en la vagina.
4. Sustancias dañinas
El tampón está elaborado a base de algodón y fibras sintéticas. La mucosa de la vagina, que está permanentemente húmeda, puede absorber residuos de esas sustancias que queden en el interior del conducto. Esta acumulación puede ocasionar serios daños.
5. Cuidado con los perfumados
Los tampones perfumados implican mayores riesgos. En su elaboración se utilizan sustancias químicas que podrían afectar la zona vaginal. Algunos de los primeros síntomas podrían ser picazón y ardor. En cualquier caso, es preferible utilizar los elaborados a base de productos orgánicos.
6. Rotos, ni hablar
Un tampón con la envoltura rota no debe usarse. Es una prueba de manipulación previa y existen riesgos de contaminación con agentes infecciosos que podrían alterar la flora vaginal.
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