TEGUCIGALPA, HONDURAS. Amparado en una promesa que recibió, Marco Antonio Paz removió las láminas que servían como techo de su hogar, protegiéndolo de la lluvia u otros factores de la intemperie.
Él regaló el material -que tenía algunos daños- a personas necesitadas ya que personeros de un programa de acción social por parte del Gobierno le habían dado su palabra de que le adecuarían un techo digno.
«Le quité el techo porque Vida Mejor iba a venir a arreglarlo y llevo semanas esperando a que vengan y no lo han hecho. Me dieron orden de que lo ‘destartalara’ porque ellos lo iban a reparar», dijo el abuelito al canal de televisión HCH.
«El techo estaba en malas condiciones pero no se me metía el agua. Como ellos iban a venir, yo regalé la lámina a una gente que no tenía. Me quedé peor, sin lámina ni techo», ahondó.
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Vulnerable
Con las lluvias recientes en la capital -ocasionadas por una onda tropical y una vaguada- su hogar en el sector cuatro de la colonia Villanueva de Tegucigalpa está repleto de agua y totalmente desprotegido.
Paz duerme temeroso, pues considera que incluso está bajo el riesgo de que se caigan las paredes y se destruya su casa. Ahí pasa usualmente tiempo con sus nietas, pues ya no tiene a su esposa, que expiró hace casi tres años.
Por la situación descrita, el adulto mayor implora a los encargados de Vida Mejor que se apiaden y cumplan con lo que supuestamente se comprometieron tiempo atrás, dejándolo ilusionado.
+504 9902-5854 es el número de celular de Paz, quien lo compartió en búsqueda que los empleados públicos en mención u otras personas de buen corazón le ayuden ante el problema que aqueja.
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