Tegucigalpa.- El problema de la falta de medicamentos es un asunto que afecta a muchos hondureños, quienes no solo deben lidiar con las enfermedades que padecen, sino que también deben batallar con la falta de medicinas que actualmente tiene de rodillas a los principales centros hospitalarios del país.
El Hospital Escuela (HE), el Hospital San Felipe y el Hospital Psiquiátrico Mario Mendoza, son solo algunos de los centros asistenciales que están sufriendo un alarmante desabastecimiento medicinal, según denuncias.
En las redes sociales y medios locales, varios pacientes se han quejado de como este problema, cada día empeora más.
Duros testimonios
Juana Ayala es una hondureña que vive un calvario, pues ella debe tener cada tres días 370 lempiras, para poder comprar los medicamentos que su esposo necesita.
Argumentó que cada vez que llega a la farmacia del HE, le dicen que no hay ciertos medicamentos y por eso a veces debe comprarlos en otro lado.
“De dos recetas que uno trae solo le dan uno, porque solo hay uno”, expresó la mujer a Hoy Mismo.
Denunció que no es justo que ellos gasten en medicamentos, ya que para eso pagan impuestos.
El caso de la señora Santos Salgado, es otro duro testimonio, ella fue al Hospital San Felipe, para solicitar unas medicinas que ahí le recetaron y la respuesta fue que no había ninguno de los medicamentos que necesita.
Lamentó que en el hospital no le diera sus medicinas, algo que podría perjudicar su salud, pues ella padece de depresión y ansiedad.
Explicó que la única opción que le queda es comprarla ella misma, pero aseveró que las cosas no deberían ser así.
Están cansados de la situación
Otro centro donde también están registrando escasez de medicamentos es en el Instituto Nacional del Diabético (INADI), sitio donde varios pacientes se han quejado de diversivas problemáticas.
Don Miguel es un hondureño que cuando llegó por sus medicinas para tratar su diabetes, no encontró nada.
Afirmó que en la farmacia le comentaron que de los tres medicamentos que le recetaron, no había ni uno solo.
“Todo esto es un desastre, por lo menos era raro el medicamento que no había y ahora no hay nada”, aseveró.
Asimismo, le pidió al ministro de Salud, José Manuel Matheu, que haga algo para solventar esta crisis sanitaria.
El problema del desabastecimiento medicinal, también habría llegado al Instituto Nacional Cardio Pulmonar (INCP), más conocido como «El Tórax», de acuerdo a algunos ciudadanos, pues no hay algunos medicamentos.
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Umaña a Matheu: Se agota el tiempo para medicamentos que prometió
El presidente de la Asociación de Médicos del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) en la zona norte, Carlos Umaña, afirmó que el dictamen de la comisión sobre medicamentos será negativo. Además, le recordó a Manuel Matheu que se terminó el plazo a la Secretaría de Salud para abastecer de medicinas.
El diputado por el Partido Salvador de Honduras (PSH), Carlos Umaña, le hizo un recordatorio al secretario de Salud, sobre el tema. «Le recuerdo al ministro de Salud que se agota el tiempo para demostrar que ya llegaron los medicamentos que le prometió a la Comisión», especificó.
Umaña, quien además está al frente de la Comisión creada por el Congreso Nacional, para analizar el caótico desabastecimiento de medicinas a nivel nacional, argumentó además, que de no haber medicamentos, la Comisión citará a Matheu para que rinda cuentas ante el Congreso Nacional. «Lo más razonable es que el Congreso interpele al doctor Matheu para que asista aquí, al hemiciclo», agregó.
Problema constante
El problema con la escasez de medicamentos a nivel nacional es algo que se viene padeciendo desde hace años. No obstante, a inicios del 2022 la situación se agudizó, por ende, la Secretaría de Salud (SESAL) declaró estado de emergencia por la ausencia de fármacos. Se trataría de unos 37 productos vitales que no han ingresado a los centros de salud del país.
Uno de los hospitales que ha pedido a las autoridades abastecer medicinas con urgencia es El Tórax, ya que hasta los momentos, este se encuentra con un 85 % de desabastecimiento, lo que activa las alertas.
«Tenemos problemas porque nuestros pacientes tienen enfermedades crónicas cardíacas y pulmonares. Tenemos pacientes con alto riesgo de complicarse o de morir», lamentó la epidemióloga del hospital, Silvia Portillo.
En ese sentido, otros médicos de diferentes instituciones públicas han expuesto la gravedad de la situación y han elevado el clamor en busca de soluciones. Sin embargo, en el gremio de salud ya perdieron las esperanzas.
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