QATAR.- Bayern Múnich despertó a Tigres de su sueño y consiguió el título que le faltaba para completar un histórico «sextete». Con un gol polémico del francés Benjamin Pavard, los alemanes vencieron 1-0 al equipo del «Tuca» Ferreti y ganaron el Mundial de Clubes 2020.
El entrenador del Bayern, Hansi Flick, advirtió en conferencia de prensa que Tigres los exigiría en todo sentido y así ha sido. El campeón de la Champions League dominó durante todo el partido, pero el esfuerzo de los mexicanos provocó que la diferencia fuera mínima.
Flick, uno de los héroes inesperados de esta hazaña, contó con dos bajas de última hora: Jerome Boateng, que abandonó la concentración por el fallecimiento de su ex pareja, y Thomas Müller, positivo por coronavirus pocas horas antes de la disputa de la finalísima.
Su lugar en el once lo ocuparon Niklas Süle y Leroy Sané, entrando también el ex atlético Lucas Hernández por Marc Roca, lo que hizo que David Alaba adelantara su posición al centro del campo.
El VAR y la polémica
El partido habría sido totalmente distinto si el VAR no hubiese anulado un tanto de Joshua Kimmich apenas en el minuto 15. El 1-0 no llegó debido a que consideraron que Lewandowski intervino en la visión de Nahuel Guzmán.
El club de Monterrey hizo un partido digno y mantuvo su portería en cero durante casi una hora de partido hasta los 14 de la segunda parte.
Con Tigres aguantando con mucho orden y concentración defensiva, el VAR volvió a tomar un rol protagónico. Benjamin Pavard tomó un rechace de Guzmán y marcó un gol histórico para los germanos. El tanto fue invalidado en primera instancia, pero el videoarbitraje certificó que la posición de Lewandowski era legal y concedió la anotación.
La polémica, a parte de la posición de Robert, se dio porque el VAR no observó una mano ofensiva del polaco en la misma acción.
El cuadro regiomontano estaba desgastado como para buscar el empate, por lo que el gol de Pavard fue suficiente para que Bayern ganara la final.
Tigres, que hizo historia al convertirse en el primer equipo de la Concacaf que disputó una final de «Mundialito», fue un más que digno rival para este legendario Bayern de Flick, que en apenas 15 meses ha convertido a un equipo «normal» en uno de los mejores de la historia del deporte.
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