CORTÉS, HONDURAS. Desde comienzos de la pandemia del COVID-19 siempre ha estado el miedo por el contagio de la enfermedad, no obstante, en las últimas semanas los médicos reportan que las atenciones son más bajas debido al temor de las mujeres.
Los profesionales de la medicina han recalcado que como en otras áreas, aún existen personas que mantienen presentes las consecuencias que tener el virus implica, sobre todo, al convivir con sus familiares, y más si tienen bebés o adultos mayores.
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Recalcaron que este inconveniente deja en evidencia que las mujeres están llegando al ginecólogo pero en menor medida. No obstante, lo anterior, se puede resolver, dependiendo del sitio que visiten o el galeno que las atienda. De igual forma, el no ir a las consultas puede llevar a consecuencias trascendentales en las mujeres hondureñas, aseguran expertos consultados.
Diario TIEMPO habló con la doctora Doria Carrasco, quien es miembro de la Junta Directiva de la Sociedad de Ginecología y Obstetricia de Honduras. Ella determinó que desde comienzos de la pandemia, las atenciones han disminuido, pero en especial, esto se agudizó en el año 2020 y el primer semestre del 2021.
«Gran razón de esto es por el miedo de ir a consulta y que los centros asistenciales se centraron en la atención de pacientes COVID-19», añadió.
Baja supera el 80 %
Por otro lado, la galena indicó que la reducción en esta área de ginecología supera el 80 %. Además, aseveró que las féminas llegaban más que todo a las emergencias, con complicaciones, y no a una consulta médica.
«Por ejemplo, una paciente embarazada solo iba a su parto, y muchas llegaban con complicaciones que se pudieron detectar en el control. Hay muchas enfermedades que nosotros podemos encontrar en los chequeos», añadió.
De igual manera, la profesional aseguró que podían llegar mujeres con sangrados uterinos, quistes u otro tipo de trastornos e incluso notaban hasta síntomas de anemia.
La doctora Carrasco mencionó que para abordar el tema e irse recuperando poco a poco han comenzado a promocionar aún más el control prenatal, la atención y ginecología en general.
Están tratando de recuperarse
La hondureña precisó que observan que las mujeres van obteniendo más confianza y ahora acuden un poco más a las consultas, ya sea por la vacunación u otro tipo de medidas que se han adoptado. Ahora atienden de 400 a 500 féminas al mes, una comparativo que no tuvieron en el 2020 y esperan que siga así.
Igualmente, relató que para darle a las hondureñas mayor seguridad, promueven que en las clínicas, ya sea públicas o privadas, se muestre el carnet de vacunación y claramente siguen todas las medidas de bioseguridad.
La médica Carrasco manifestó que a nivel mundial los ginecólogos u organizaciones han promovido la consulta de atención a la mujer. Ella externó que en Honduras eso debe darse, ya que no es un hábito que las féminas asistan a un control ginecológico.
«Ha sido un trabajo de años el tema de la inclusión ginecológica y la pandemia vino a deteriorar eso», agregó. Al mismo tiempo afirmó que las consecuencias en las mujeres embarazadas al no asistir a un control se veían en la mortalidad, pues en su último reporte había 175 muertes maternas en lo que iba del 2021.
Para finalizar, la doctora recomendó a las hondureñas que retomen los controles ginecológicos y obstétricos, así como tomar siempre las medidas de protección para evitar contagio, y lo más importante es que cumplan con el esquema de vacunación.
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