TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El presidente de la República, Juan Orlando Hernández Alvarado, ejerció el sufragio en la ciudad de Gracias, Lempira, de donde es originario.
El mandatario llegó en compañía de su esposa, Ana García de Hernández, hasta la escuela Juan Lindo, lugar donde cursó sus primeros años de estudio.
Allí mismo, Hernández se mostró contento por la manera pacífica en que se han desarrollado hasta entonces las elecciones. «La tranquilidad es lo que está prevaleciendo y estoy contento por eso, todos debemos salir a votar», informó.
Asimismo, pidió a la población llegar a votar con calma a cada centro de votación y esperar los resultados finales de los votos. «Pido a la gente que vayamos con calma y como debe ser, esperar que se cuenten todos los votos. En este momento hay que decirle a la gente con claridad que, aunque el proceso sea lento, hay que esperar los resultados», expresó.
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Seguimiento a obras que inició
El gobernante indicó que el próximo gobierno que asuma en 2022, deberá darle seguimiento a muchas de las obras que él está dejando. Detalló que esos son proyectos en aspectos sociales, de infraestructura, y apoyo a los agricultores, micros, pequeños y medianos empresarios.
«Se debe seguir el proceso de infraestructura a nivel nacional, así como también los programas sociales y de apoyo a la microempresa y emprendedores», expresó.
Además, Hernández aseguró que quien gane debe «mantener la macroeconomía sólida y tampoco debemos descuidar la seguridad. La seguridad no se debe descuidar ni un segundo», explicó.
Juan Orlando recordó su mandato
De igual manera, el presidente recalcó los logros que su mandato pudo dar, pues asegura que en 2014 recibió un país «quebrantado». «Nos entregaron un país quebrantado, y ahora dejamos un país con unas finanzas públicas sanas y muy robustas», aseguró.
Señaló que cuando asumió el poder, Honduras era el país más violento de la tierra, pero dijo que ya no lo es. Dijo que la reducción de la violencia ha obedecido al esfuerzo de su administración invirtiendo en seguridad. «Yo recibí el país más violento sobre la faz de la tierra y dejamos un país con unas finanzas sanas. El Gobierno que viene debe potenciar lo que hemos hecho», apuntó.
El mandatario hondureño externó que el tema de la seguridad fue el principal desafío que enfrentó al iniciar su mandato en 2014, con una tasa que rondaba los 90 homicidios por cada 100.000 habitantes.
«Logramos reducir la tasa de homicidios en un 58 %, pasando de 86,5 homicidios por cada 100.000 habitantes a 37«, concluyó Hernández.
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