REDACCIÓN. Mucho centroamericanos de la caravana migrante ya se cansaron de esperar en la Cuidad Juárez, México, y se están entregando a los funcionarios fronterizos de Estado Unidos, en Texas.
Tomando esta opción con la esperanza de que se les permita una vía rápida para solicitar asilo.
Tan solo el pasado mes de marzo, más de 103 mil indocumentados los rechazaron o detuvieron a lo largo de la frontera sur.
Por eso mismo, para los agentes de la frontera esta situación pone a prueba los recursos con los que dispone.
«Se esta poniendo la situación muy difícil, son cientos de personas entregándose a diario. En los últimos 30 días hemos promediado aproximadamente 860 detenciones diarias en este sector. Eso pone a prueba nuestras capacidades, las cuales ya están llegando a su límite» dijo el vocero de la Patrulla Fronteriza en El Paso, Texas, Ramiro Cordero.
Con lo que concluyó «porque como vuelvo a decir, no es fácil, uno detener, dos trasportar y tres procesar a todas estas personas».
Además, para complicar aún más las cosas, muchos de los que se entregan en la frontera son familias completas con menores de edad.
Desde mediados de octubre de 2018, miles de personas, en su mayoría de Honduras, han viajado en caravana hacia EE.UU. a través de México, algunos de ellos caminando largas distancias.
Detenciones en México
Por otro lado, este martes agentes migratorios mexicanos dieron detención, por medio de un operativo en el que hombres, mujeres y niños los subieron en contra de su voluntad en vehículos oficiales.
Según AP, la estrategia de las autoridades fue invitarlos a tomar un descanso después de siete horas de caminata bajo el sol radiante. Una vez dispersos, los agentes se distribuyeron al comienzo y al final de la caravana. Asimismo, se llevaron por la fuerza a varios de sus integrantes.
Hasta 500 migrantes pudo haber sido recogidos en la redada, reportó The Associated Press.
Algunas de las mujeres y los niños lloraban y gritaban durante las detenciones en el costado de una carretera.
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