TEGUCIGALPA, HONDURAS. La violencia continúa imperando en la capital Tegucigalpa, ya que la tarde de este miércoles dos cuerpos «encostalados» fueron hallados en un sector de la colonia Villa Vieja, salida al oriente del país.
Datos preliminares indican que se trataría de dos hombres, cuyos cadáveres habrían sido arrojados desde una unidad del transporte público, mejor conocido como «bus ejecutivo o rapidito».
Los cuerpos de las víctimas estaban abandonados a orilla de la carretera y metidos en bolsas y sacos negros. Al parecer estarían atados de pies y manos.
Además, en la escena también se observó una fotografía, de quien se presume sería una de las víctimas.
En lugar donde abandonaron los cuerpos hay más sacos con rastros de sangre, por lo que no se descarta que sean más cuerpos.
Hasta el sector llegaron agentes de la Policía Nacional para acordonar la escena del crimen y esperar la llegada del personal de Medicina Forense.
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Requieren a dos personas
Cámaras de seguridad captaron el recorrido del bus rapidito, desde donde abandonaron los cuerpos en ese sector de la salida a oriente del país. Se trata de la unidad con registro 254, placas TPA-1116 de la ruta La Peña-Mercado.
Tras darse la alerta, agentes policiales comenzaron la persecución de la unidad del transporte hasta un estacionamiento privado en el sector de la colonia La Cañada de Comayagüela. Ahí agentes policiales detuvieron a dos hombres presuntamente relacionados con el crimen.
Hasta el momento se desconoce la identidad de la víctimas, pero personal de Medicina Forense se apersonará al sector para realizar el levantamiento de los cuerpos y después proceder con su traslado a la morgue judicial capitalina.
Asimismo, agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) realizarán las investigaciones del caso para esclarecer este nuevo hecho violento.
Se está a la espera de que las autoridades policiales brinden oficialmente un informe sobre las investigaciones en torno al caso.
Expertos señalan que la mayoría de estos actos violentos terminan siendo una línea de expedientes más entre la impunidad y caen en el estatus de engavetados, porque nunca se sabe por qué los mataron o quiénes cometieron el crimen.
Según criminólogos, los grupos que acostumbran a desmembrar a sus víctimas son la Pandilla 18 y la Mara Salvatrucha. Mientras que, los motivos se relacionan con miembros de sus mismas organizaciones que los traicionan luego de recibir la extorsión, integrantes de la banda contraria o personas que se quieren pasar de listos.
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