Tegucigalpa, Honduras. Un ambiente de desconsuelo se vive en el velatorio de Henry Adalid Díaz, quien pereció en su intento de conseguir el «sueño americano».
Primero, vecinos le dieron el último adiós en la colonia 19 de Diciembre, específicamente en la casa donde él vivía.
Luego, familiares trasladaron el cuerpo al municipio de Goascorán, en el departamento de Choluteca, lugar de donde era originario, por lo que sus restos mortales serán sepultados después de una misa en ese mismo lugar.
Vecinos de Henry lo recuerdan como una persona muy alegre, servicial y trabajador, por lo que lamentan la mala fortuna del joven.
Una de sus hermanas, entre lágrimas de sufrimiento contó que en el próximo mes de diciembre él estaría cumpliendo 27 años.
Otro de los familiares lamentó la decisión que el muchacho tomó, el de emprender el viaje hacia los Estados Unidos dienciendo “él murió tratando de ayudar a otra persona”.
Asimismo, la tía, con quien vivía el joven, relató que la última vez que habló con su sobrino fue el domingo en horas de la tarde. Según ella, Henry murió tratando de ayudar a una joven, y en ese momento la policía mexicana le disparó.
El hecho
La fecha de la tragedia ocurrió el pasado domingo luego de un enfrentamiento entre migrantes y policía.
El hecho se suscito en el puente Rodolfo Flores, que separa a Guatemala de México.
Cabe señalar que Henry Adalid Díaz se conviertió en el tercer hondureño que muere en las caravanas de migrantes.
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El joven decidió emprender el viaje hacia el país norteamericano con un grupo de amigos.
Según vecinos, un grupo de al menos de 30 jóvenes salieron del sector con un solo objetivo: llegar a los Estados Unidos.
Al parecer, el objetivo del catracho, Henry, era trabajar poder comprar una casa.
