HONDURAS. Ya son tres los migrantes, dos hombres y una mujer, de la más reciente caravana, que han muerto en busca del tan anhelado «sueño americano».
El deceso más reciente ocurrió en el desierto de Sonora, México, y la víctima se llamaba Senia Barahona, originaria de Tocoa, Colón, quien salió el 1 octubre hacia EE.UU.
Al respecto, autoridades mexicanas dijeron que la mujer fue encontrada ya sin signos vitales y que presuntamente murió deshidratada.
Asimismo, Marlon Roberto Canales Enamorado, de 38 años de edad, originario de la aldea El Porvenir, municipio de San Nicolás, Santa Bárbara, murió en un sector desolado de Guatemala, cercano al paso fronterizo de Corinto.
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Desde Guatemala, medios de comunicación informaron que su cadáver estaba ya en avanzado estado de descomposición. Las causas de su muerte aún se desconocen. Cabe señalar que él aún no ha sido repatriado. De momento permanece en la morgue de Puerto Barrios.
Y el primero compatriota de la caravana de migrante en morir durante su recorrido a EE.UU. fue un joven de tan solo 17 años, llamado Félix Enrique Lara Maldonado.
El muchacho, quien vivía con sus padres en una pequeña casa ubicada en El Merendón, falleció luego de caer de una rastra en movimiento en Guatemala, a la que se subió para descansar los pies después de tanto caminar.
Los restos del menor ya descansar en su natal Honduras, específicamente en la comunidad de San Antonio del Perú, lugar que lo vio crecer y donde residen su papás.
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