RIFLAZOS 110

Marvin Ponce

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Marvin Ponce

ORACULO

Marvin Ponce ya tiene quien le haga competencia. Kikito Ortez es desde la semana pasada el nuevo oráculo. El ex tribuno electoral le hace ahora competencia al asesor presidencial en eso de las predicciones. Por cierto, han coincidido que el infortunio viene esta misma semana sobre varios diputados, que por uno u otro clavo, van a terminar en el mamo. A ver si se cumplen los pronósticos.

MIEDOS

Por cierto, terminada la “Semana Zángana” vuelven los miedos en los uñudos. Hay muchos que respiraron tranquilos estos días en que la justicia andaba de vacaciones. Pero acabado el feriado, esos que viven con la espada de Democles encima, retoman la canillera porque no saben qué día les cae la ATIC  y se los lleva a que den cuenta de lo que han hecho.

FRENTES

Pero mientras unos descansaban, otros vivían una semana intensa. Este es el caso de un director de una empresa autónoma del Estado que le valió madre y se llevó a los dos frentes a la misma isla. El hombre (para más señas chaparrito y trigueñito) se las arregló para dedicarles tiempo a las dos damas. A la titular la mantuvo contenta durante el día y a la suplente la alegró por las noches. Al menos eso es lo que contó el edecán el sábado que se bebió sus traguitos.

SEGURIDAD

A propósito de edecanes, a que no se imaginan qué altos personajes del actual gabinete viajaron en el mismo avión y se hospedaron en el mismo hotel con los miembros de la seguridad estatal que les brinda protección en estas tierras. Resulta que ni las doñas ni los “guirros” cargaron bolsas en los centros comerciales del extranjero, porque para eso llevaron a los eficientes milicos. Allá vieron en Miami a dos de ellos haciendo estos “pases”.

ATREVIDO

Y bueno, de acuerdo a las cifras de las autoridades de contingencias, cerca de la mitad de este país en el que el 70 de su población es acabada, se movilizó a los destinos turísticos. Hay que ser atrevido para jurar que cerca de 3.5 millones de parroquianos de estas honduras salieron a dar su vueltín durante la Semana Mayor. Y lo “pior” es que hay quien les cree.