TEGUCIGALPA, HONDURAS. Alfredo Ortiz, portavoz del Centro Hondureño para el Niño Quemado (CEHNIQ), informó que seis (6) menores de edad permanecen hospitalizados a causa de quemaduras en su cuerpo y dos de ellos a consecuencia de la pólvora.
Los dos últimos ingresos son los de un niño que sufrió quemadura con flama, tras un incendio en Comayagüela. Entre tanto, el otro es un menor procedente de San Marcos, Ocotepeque y que sufrió lesiones por el contacto con un cable de alta tensión.
También, Ortiz comentó que el primer menor quemado por pólvora que ingresó al CEHNIQ se registró el 5 de noviembre del año en curso. El paciente es procedente del municipio de Valle de Ángeles, Francisco Morazán.
El segundo menor quemado por pólvora es procedente de Marcovia, Choluteca. El pequeño de 7 años ingresó el pasado lunes 28 de noviembre al centro, comentó su portavoz institucional.
Ortiz destacó que en ambos casos los pacientes permanecen estables y su recuperación avanza en debida forma.
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Un «gran quemado»
Por otro lado, Alfredo Ortiz destacó que uno de los seis hospitalizados es un «gran quemado» y recibe este término debido a que tiene lesiones en el 60% de su superficie corporal.
En este caso, el menor de 12 años estaba bajando papayas y tocó un cable de alta tensión, hecho suscitado en San Marcos Ocotepeque. Debido a la fuerza de la corriente, el niño tiene quemaduras de cuarto grado y traumatismos de cráneo o craneoencefálicos.
El portavoz del Centro Hondureño para el Niño Quemado, instó a los padres de familia y adultos a estar pendientes de las actividades que hacen sus hijo y a no darles pólvora en esta temporada de fin de año.
