SAN PEDRO SULA. Todo ocurrió el 8 de enero del 2015 cuando José Manuel Uclés Gonzales era guardia de seguridad de una farmacia de la cuidad industrial.
Una tarde, una niña pasó junto a sus dos hermanos por el local en busca de una oportunidad laboral. Debido a que la menor ayudaba a su familia con los gastos de su hogar. Acción también derivada a la falta de empleo de su madre, ya que no tenían dinero para alimentarlos.
En ese momento Uclés le ofició a la menor hacer la limpieza de la farmacia. Lo anterior, bajo la condición que tenía que estar sola para hacer el aseo. De inmediato sus hermanitos se fueron de lugar, sin imaginarse lo que le sucedería a su hermana mayor.
Cuando estaban solos y la pequeña realizaba el aseo, el guardia se acercó a ella. Fue en ese momento cuando empezó a tocar su débil cuerpecito. Ella desesperada luchaba y gritaba con todas sus fuerzas para evitar el hecho, pero el desalmado hombre la terminó haciendo suya a la fuerza.
Lea también:Acusan a joven de violar a un niño de cinco años en Choluteca
Luego de abusar de la menor, el hombre en su afán de hacer mayor daño, introdujo la cabeza en una bolsa de plástico hasta asfixiarla. Posteriormente consiguió unas bolsas grandes para basura e introdujo el cuerpo de la menor. De ahí la fue a tirar a un lugar baldío cerca de la farmacia. Minutos después llegaron sus hermanos a preguntar por ella, en ese momento el guardia muy tranquilo les dijo que se había ido a su casa.
Posteriormente, los hermanos le avisaron a su madre, esta de inmediato notifico a las autoridades, quienes con el pasar de las horas dieron con el culpable del abominable crimen. Ya una vez apresado, el hechor confesó su acto.
Al pasar del tiempo se hizo justicia
El guardia estuvo recluido en prisión. Pero sin una sentencia debido a que no se tenían las pruebas suficiente para refundirlo en la cárcel.
El día de ayer jueves, Uclés fue llevado a juicio oral y público donde la Fiscalía logró demostrar la culpabilidad del autor del crimen. Asimismo serán 30 años que el guarida deberá pagar en prisión. Cabe mencionar que la menor apenas tenía 12 años de edad, cuando el guardia le arrancó la vida y sus ilusiones.
