Redacción. Autoridades de educación del municipio de Marcovia, en Choluteca, reportaron este miércoles que más de nueve niños se han contagiado con el virus mano, pie y boca, conocido también como estomatitis vesicular con exantema (erupción cutánea).
María Antonia Pérez, directora de Educación Muncipal de Marcovia, expresó su preocupación en HRN dado que el virus está afectando solamente a los escolares. “Hasta la fecha —aseguró Pérez— nueve niños están contagiados con la enfermedad y varios ya se han recuperado”.
Autoridades de la Secretaría de Salud atendieron el llamado de emergencia y acudieron a una de las escuelas que tiene más foco de infecció con especialistas en el tema para hacer una evaluación médica a los niños y los docentes.
Debido al brote del virus, la sociedad de padres de familia pidió la paralización de las clases en el sector a fin de erradicar la incidencia de contagios.
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Síntomas
Entre los síntomas más notables de la enfermedad figuran: fiebre alta, dolor de cabeza, huesos y afectaciones en la piel. “Esta enfermedad es similar a la varicela, les afecta bastante la boca, por dentro y por fuera; todo el cuerpo en general. Con las altas temperaturas, los pequeños sufren bastante”, agregó Pérez.
A esta problemática se suma el alto índice de contagios de dengue. Pero “la Sesal se ha mostrado anuente con las campañas de concientización y las fumigaciones en el municipio”, concluyó.
¿Qué es el virus boca, manos y pies?
La enfermedad de mano, pie y boca es una infección viral leve y contagiosa, y es muy frecuente en los niños pequeños. Los síntomas incluyen llagas en la boca y sarpullido en las manos y los pies.
La causa más frecuente de la enfermedad de manos, pies y boca es el virus de Coxsackie. Este tipo de virus forma parte de la familia de enterovirus (que también incluye a los virus de la polio y de la hepatitis A), que viven en el aparato digestivo de los seres humanos.
No hay un tratamiento específico para la afección. Aunque lavarse las manos con frecuencia y evitar el contacto cercano con personas que padecen la enfermedad puede ayudar a reducir el riesgo de que los niños se contagien.