TEGUCIGALPA. La justicia de los Estados Unidos encontró culpable al guatemalteco Marvin Oswaldo Escobar Orellana por haber asesinado a una mujer y a sus dos hijas: las tres eran hondureñas.
El hombre recibió tres cadenas perpetuas, las cuales son producto del delito de homicidio en primer grado.
Escobar Orellana mató con una arma de fuego a la madre hondureña junto a sus dos hijas, quienes llegaron a EEUU buscando una mejor vida.
Triple asesinato
Medios internacionales, revelaron que la masacre ocurrió el 16 de julio de 2019 dentro de la casa de Escobar en el complejo Laurel Village, justo al norte de la carretera interestatal 235, en Iowa.
La familia hondureña era conformada por Rosibeth Flores Rodríguez de 29 años y sus dos hijas, Grecia Daniela Alvarado Flores (11 años) y Ever José Mejía (5 años).
Ellas vivían en el sótano de la casa del guatemalteco, pero antes que finalizara el día, hubo una fuerte discusión entre Rosibeth y Marvin, esa pelea desencadenaría una tragedia.
En uno de los juicios en su contra, Escobar Orellana testificó que la mujer trató de matarlo con una arma blanca, por lo que este se defendió disparándole con una pistola, la hondureña recibió dos impactos de bala.
Luego de eso, y algo que sigue en investigación, fue que por algún motivo el hombre se fue al sótano y le disparó a las dos niñas de la madre hondureña, matándolas al instante.
Condena
Una vez cometido el crimen, el hombre llamó a la Policía y confesó que todo había sido un accidente, pero los jueces que estuvieron a cargo de su caso no le creyeron.
El juez David Porter, dijo que la muerte de la mujer podría entrar en la categoría de defensa propia, es decir, que al estar en peligro, Escobar Orellana se tuvo que defender.
“La muerte de Rosibeth Flores Rodríguez fue justificada, pero nada justifica el asesinato de dos niños, absolutamente nada”, mencionó el juez.
Señaló que no era posible que un adulto le quitara la vida a dos niñas llenas de inocencia y con una vida por delante, para eso no existe justificación alguna.
“Entrar a ese sótano y acabar con la vida de dos niños inocentes que nunca habían hecho nada malo, acortando sus vidas, tampoco es impensable”, expresó el fiscal Kevin Hathaway.
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Declaraciones
Ante la sentencia del hombre que mató a la familia hondureña, la madre de la muchacha de 29 años, Betty Rodríguez, dijo que la muerte de su hija y la de sus nietas ha sido un duro golpe para ella.
”Rosie, Daniela, Ever fueron los mejores regalos para mí, mi vida cambió para siempre
el día que tú, Marvin, les quitaste la vida. Mi hija era mi amiga, mi sistema de apoyo, mi todo y mis nietos eran mis tesoros”, manifestó la señora.
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