Tegucigalpa. La Secretaría de Desarrollo Económico a través de la Comisión Administradora del Petróleo (CAP), da a conocer la nueva estructura de precios de los combustibles en la que se aplican aumentos.
En ese sentido, estos oscilan entre los 11 y 38 centavos del lempira y sólo la gasolina superior reportará una rebaja de ocho centavos.
Cabe mencionar, que con esta rebaja en la gasolina superior, el precio en bomba será de 84.40 lempiras por galón.
Por su parte, el galón de la gasolina regular que se compra a 77.14 lempiras sufre un aumento de 0.11 centavos por lo que su nuevo precio será de 77.25 lempiras.
El diésel que se cotiza a 66.61 reflejará un aumento de 0.15 centavos por cada galón por lo que su nuevo precio en bomba será de 66.76 lempiras para la plaza de Tegucigalpa y lugares aledaños.
Mientras tanto, el keroseno reportará un incremento de 0.38 lempiras por lo que su nuevo precio será de 47.69 lempiras por cada galón.
Asimismo, el galón LPG vehicular tendrá un aumento de 0.13 centavos por lo que su nuevo precio será de 38.67 lempiras.
La nueva estructura de precios de los combustibles entra en vigencia a partir de las 6:00 de la mañana del lunes 17 de julio.
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En ese mismo tema, rebajas en los combustibles en incongruencia con los precios a nivel internacional
El coordinador de la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica de Honduras (Adecabah), Adalid Irías, estas rebajas no reflejan en realidad lo que deberían disminuir los carburantes en Honduras.
“Realmente la fórmula de los combustibles no está diseñada para beneficiar a los consumidores”, dijo.
“Sino para llevar mayores ingresos a las arcas del estado”, manifestó Irías en cuanto a este tema.
“Nunca, las disminuciones que se dan a nivel internacional con el crudo. No siempre se trasladan en esa misma proporción que se asignan e los combustibles a nivel local”, dijo el coordinador de Adecabah.
De igual forma, aseguró que cuando el precio del barril presenta alzas, ahí si se proyecta el precio real.
Asimismo, recordó que cuando el crudo llego a 30 dólares, no se vio reflejado la disminución real.
En ese sentido, el defensor de los derechos a los consumidores, aseguró que el precio del barril debería ser relativo al precio que se cobra a nivel local.
El problema, según Irías, es que en países como Honduras, una gran parte de los productos y desarrollo, depende de los carburantes.
Entonces los gobiernos ven este como el negocio de la “gallina de los huevos de oro”.
Asimismo, manifestó que esto queda evidenciado por que a nivel de Centroamérica, en Honduras están los precios de combustibles más elevados.
Esto se debe a que Honduras es la que graba en mayor proporción el precio de los combustibles.
En ese sentido, cuando disminuye el precio del crudo a nivel internacional, en Honduras baja lentamente.
