21.6 C
San Pedro Sula
domingo, abril 27, 2025

Wilmer Montoya, el comunicador multifacético con décadas de experiencia en medios de comunicación

Debes leer

Redacción. Ser comunicador social y corresponsal conlleva una gran responsabilidad, ya que en una misma persona se combinan las funciones de conseguir la noticia, obtener información, grabar, editar y entregar un producto final para presentarlo en espacios noticiosos.

Tal es el caso de Wilmer Montoya, actual corresponsal de la televisora HCH en La Ceiba, la «Novia de Honduras». El hondureño lleva varios años en esta empresa, pero cuenta con una amplia trayectoria, puesto que ha trabajado en diversos medios de comunicación durante décadas.

Nacido en San Pedro Sula, Cortés, hace 50 años, Montoya ingresó al ámbito de la comunicación siendo aún un adolescente en 1989. La oportunidad le llegó gracias a su tía, que trabajaba en un canal de la capital industrial.

Fue ella quien comentó a dos directivos que su sobrino quería trabajar, abriéndole así las puertas a un largo camino en las comunicaciones. Actualmente reside en La Ceiba, a donde se mudó por motivos profesionales.

Wilmer Montoya
Además de HCH, Wilmer Montoya trabaja en el Canal de Los Ceibeños 45 TV, donde tiene su propio programa.

El comunicador habló en exclusiva con Diario Tiempo, brindando más detalles sobre su vida y trayectoria profesional. Además, destacó que su familia es un pilar fundamental para continuar adelante y poder hacer lo que más le apasiona.

Lea además: Bryan Amador leva fe y ayuda de los más necesitados con su «Abrazo de Esperanza»

Entrevista

¿Cómo inició en los medios de comunicación?

Empecé en 1989 cuando existía en San Pedro Sula Telesistema Hondureño como camarógrafo en el noticiero Telediario, que lo dirigía el licenciado Gabriel García Ardón (QEPD).

Luego se me fueron dando más oportunidades en diferentes medios de comunicación y emisoras. Junto con el licenciado Gabriel también trabajé para Noticieros Hoy Mismo como camarógrafo; después con Canal 11, siguiendo la tradición de Telediario.

Pero luego desapareció esto porque don Gabriel dejó Televicentro y yo buscaba otra manera de seguir en los medios de comunicación. Me retiré como 2-3 años de la televisión. En ese tiempo me dediqué a trabajar para la radio, siendo uno de los fundadores de Musiquera.

Wilmer Montoya 3
Durante la pandemia del covid-19, Wilmer estuvo frente a las cámaras de Canal 6.

Después de 3 años, me retiré de la radio y regresé a Televicentro con una nueva oportunidad, siempre como camarógrafo, trabajando con Hoy Mismo, Telenoticias y los programas del ingeniero Salvador Nasralla.

¿Cuál fue su primera formación?

Mi primera formación fue principalmente en cámaras. A mis compañeros periodistas, que trabajaban en los programas en los que era camarógrafo, les enseñé a trabajar sus perfiles durante las grabaciones, entre ellos varios reconocidos en San Pedro Sula.

¿Hubo algunos obstáculos en sus inicios?

Sí, ese ciclo terminó y me retiré por situaciones familiares. Comencé a tener problemas familiares, incluyendo la pérdida de una vivienda, ya que lamentablemente tuve que despedirme de mis prestaciones para solucionar ese problema.

Pero perdí mi vivienda debido a la situación económica que estaba viviendo. En ese momento, mi hija tenía problemas neurológicos y eso cambió mi vida. Tuve que retirarme.

¿Estudió Wilmer Montoya periodismo?

No, y lo voy a decir aquí: soy un comunicador social. Tuve la oportunidad de entrar a la universidad, pero no terminé porque viví situaciones difíciles con mi familia y me dediqué a trabajar de manera empírica.

Los resultados son estos. Trabajé en Diario La Prensa durante el golpe de Estado (2009). Después tuve un espacio en la radio El Mundo, que dirigía el licenciado René Madrid, en un programa llamado El noticiero de La Palabra. Eso ha sido mi vida; trabajar en este sentido.

El catracho ha construido una carrera basada en sólidos valores éticos.

¿Cómo salió de San Pedro Sula y se mudó a La Ceiba?

Me mudé a La Ceiba con la intención de laborar para los medios de comunicación y se me presentó la oportunidad con la licenciada Karina Interiano, quien era la directora de prensa de Canal 6.

Salí de San Pedro Sula para trabajar como corresponsal en La Ceiba debido a situaciones personales que tenía en ese entonces. Así me quedé y trabajé durante cinco años con Canal 6.

¿Cómo llegó a HCH?

Se me dio la oportunidad en HCH a raíz de que Ramón Maldonado me recomendó para que lo supliera, ya que él se retiraba del periodismo y como corresponsal. Es por ello que hasta ahora llevo todo este tiempo laborando como corresponsal de todo el departamento de Atlántida.

¿Al ser corresponsal y comunicador, cuántas habilidades ha aprendido?

En mi primer trabajo, en 15 días aprendí a usar la cámara, editar y salir a la calle a buscar la noticia con los compañeros periodistas.

Antes, la edición que realizaba era lineal; ahora es no lineal, con computadora. Antes me tocaba usar los casetes y DH para editar. El periodista debe tener conocimiento de cómo editar, para ver cómo le queda su material, aunque no le toque esa parte del trabajo.

HCH es uno de los medios de mayor cobertura a nivel nacional gracias a su red de corresponsales.

Ahora, así como han evolucionado las comunicaciones, la mayoría de los periodistas editan en su teléfono. La tecnología ha traído cambios significativos en los trabajos periodísticos, y yo lo asimilo de una manera positiva.

Hay que aprender a usar las herramientas y no quedarse obsoleto, no decir «lo aprendí con el sistema viejo». Todos tenemos que evolucionar. Yo lo he hecho: uso la tecnología, edito en computadora, empleo los programas y también edito en el teléfono por la rapidez que ofrece para enviar el material al canal.

¿Qué ha significado la experiencia en HCH?

Como lo dice don Eduardo Maldonado, jefe y coordinador de corresponsales, y Alex Cáceres, nosotros tenemos que dar más del 100 % y es lo que nos gusta hacer. Aquí toca ser 24/7; es un trabajo bastante exigente y hay que cumplirlo porque son las instrucciones que se nos han dado.

Tenemos que sacar las noticias, hacer cámara, ser motorista, es decir, todo. La experiencia es bastante grande para mí porque ya conozco un poco de todo por tanto tiempo en La Ceiba y por las coberturas que he realizado de todo tipo, pero no es fácil cubrir todo un departamento.

Todos los días, a eso de las 5:00 de la mañana, uno tiene que estar arriba y tener listas las noticias con las que va a conectar en vivo. Los corresponsales debemos estar de lunes a viernes 10 minutos antes de las 6:00 de la mañana para que nos pasen en vivo con las noticias importantes ocurridas entre la noche y la madrugada.

HCH le abrió las puertas gracias a sus capacidades y conocimientos.

Es una experiencia bastante bonita en HCH, pero se le debe dedicar mucho tiempo a la empresa, y a veces la familia se siente resentida porque le damos más atención al trabajo y la labor periodística.

¿Basado en su experiencia, qué mensaje le envía a las nuevas generaciones de periodistas y comunicadores?

Como decía mi abuelito, don Emilio Soriano: «Si a vos algo no te gusta, no lo hagas; pero si algo te gusta, esmérate por ello y hacelo». En mi experiencia de vida, que empecé como camarógrafo y entre empíricamente al periodismo, pero que me instaron a seguir estudiando, lo que le puedo decir a los egresados es que, si estudiaron la carrera, es porque les gusta.

Uno tiene que apasionarse por lo que hace y hacerlo con dedicación. Es una faceta en la que se debe saber lo que se tiene que decir para no meterse en problemas. Todo con cuidado, nada alocado, hacerlo de manera ordenada y planificada para tener éxito en la vida y en el ámbito periodístico.

«A uno tiene que gustarle esto y tener vocación. Hago el periodismo de una forma responsable»: Wilmer Montoya.

¿Cómo surgió su entrevista con «La More»?

Cuando hago un reporte, una grabación o una acción noticiosa, busco personas. Hay quienes me dicen que hice famoso a «La More» en la pandemia. Pero no, no era nada planificado, era mi trabajo.

En ese entonces estaba en Canal 6 y tenía que enviar la nota para el noticiero de mediodía. Como había tanta gente para ir a cobrar una remesa, esa era la noticia.

Llegué al lugar y allí estaba él (Saúl Fox). Me fui directamente a él porque lo vi queriendo hablarme. Eso no fue nada planeado, sino algo que puede pasar en cualquier momento. Así fue como nació el personaje de «La More».

«La More» se popularizó tras la entrevista que Wilmer Montoya le hizo en 2020.

¿Cuál es su mensaje para que los periodistas dignifiquen la profesión?

Sabemos que hay muchas falencias y dificultades, y que hay comunicadores e incluso periodistas que, lamentablemente, han mercantilizado la profesión. No quiero criticar que el periodismo sirva para hacer dinero o enriquecerse, pero debe trabajarse con dignidad y vocación. Es una profesión para mostrar tanto lo malo como lo bueno que ocurre en el país.

Wilmer Montoya.
«Tengo que culminar mi carrera de periodismo; para mí, sería un éxito en mi vida»: Wilmer Montoya.

¿Quiénes son los pilares fundamentales de su vida?

Mi fuerza es mi esposa y la familia que tengo en La Ceiba. Es un apoyo que tiene que tener, el familiar, porque uno anda trabajando en la labor periodística, pero la familia entiende y comprende.

Es un punto tan importante porque si a uno no lo comprenden con su trabajo, no se puede avanzar. Le agradezco mucho a mi familia; mi esposa se llama Marcela Martínez. También de mis hijos en San Pedro Sula he tenido ese apoyo.

Montoya deja en evidencia que un comunicador es capaz de ser multifacético y destacar en cada labor que ejecuta. Hoy, su anhelo es terminar la Carrera de Periodismo, para así tener el título que lo avala, pero bien, cuenta con la experiencia de la mejor universidad, la vida.

Última Hora

Hoy en Cronómetro

error: Contenido Protegido