Honduras. Los miembros de la Federación de Transporte del Servicio Especial Rapidito (Fetraseh) realizaron hoy una reunión de emergencia tras la violencia recibida por la Policía Nacional el pasado 22 de junio durante una protesta por la crisis a raíz de la cuarentena.
Entre los puntos nombrados exponen que un menor de edad recibió «maltrato físico y «ruptura de labios por los golpes». Esto es suna grave violación al derecho del niño. También atacaron a motoristas y ayudantes que no estaban precisamente en la manifestación.
Aclaran en su manifiesto, que «en el sector de Cofradía el subinspector de la Policía Nacional, de apellido Martínez, lanzó una bomba lacrimógena en contra de una abogada que apoyaba la protesta, que era pacífica. La Policía reprimió mediante golpes, humillaciones y vejámenes».
Por otra parte, detuvieron «a colaboradores y decomisaron cinco unidades de transporte» que no andaban trabajando.
De tal forma que piden que se «haga justicia», ya que esas protestas se hacen «por hambre y no vandalismo».
Necesitan alimentarse y protección del Gobierno
En un uno de los incisos del documento leído hoy en la reunión, se especifica que el Gobierno debe aplicar el artículo 25 de la Declaración universal de los derechos humanos que manda a los países a dar un seguro de desempleo a los ciudadanos.
También solicitan «la rebaja de los combustibles, apegándose a los precios internacionales. También de «los impuestos aplicados al mismo».
Debido a que tienen más de tres meses de no trabajar, piden una «prórroga, periodos de gracia de capital de intereses a todos los préstamos bancarios y tarjetas de crédito. Hasta de dos meses después de que termine la pandemia del covid-19.
Además, afirman que «no están de acuerdo con el nuevo Código Penal, que «criminaliza las luchas sociales y protege al de cuello blanco».
Para concluíe exgen un apoyo real a la micro y mediana empresa. Así como la exoneración de la matrícula vehicular 2020.
Le compartimos AQUI el documento completo sobre las denuncias y demandas.
Sobre las peticiones, Nelson Fernández, vocero de la (Fetraseh) afirma que ellos buscan hablar con «el Ministro y los comisionados para negociar un bono que no sea de 2,000 y que no sea bajo lo que ellos proponen».
Lo anterior porque las autoridades desean depositarles vía Tigo Money y otras herramientas, y los «motoristas y ayudantes son personas de clase baja que no tienen un celular para recibir ese proceso», enfatiza el transportista.
Definitivamente si no ven respuesta del Gobierno van a seguir reclamando: O nos dejan trabajar o nos dan una bonificación para salir adelante. A muchos que los están sacando de los apartamentos», concluye Fernández, por lo que el bono debe ser mayor a dos mil lempiras. Muchos tienen familia que mantener.
