TEGUCIGALPA, HONDURAS. Sor María Rosa Leggol está evolucionando muy bien, además, sus exámenes y condición mejoran notablemente, aseguran los médicos que la están tratando.
El pasado sábado 11 de julio, la Sociedad Amigos de los Niños (SAN), fundación altruista que creó María Rosa, compartió un pronunciamiento al respecto, mediante el cual se confirmó su contagio de Covid-19.
El jueves 16 de julio María Rosa fue hospitalizada por recomendación de sus médicos, en ese sentido, el comunicado de SAN dice que «Sor María Rosa fue recibida en el hospital y atendida de inmediato con brazos abiertos. Como siempre, Sor, portaba su crucifijo, que le transmite y fortalece su fe inquebrantable en la voluntad de Nuestro Señor Jesucristo».
Cabe señalar que Sor María ya suma 71 años dedicada al servicio religioso. Durante ese lapso, también desarrolló un sinnúmero de actividades en favor de los más necesitados y vulnerables.
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Sor María envía mensaje
Desde la cama, en donde recibe cuidados médicos, la destacada franciscana envió un mensaje a la población. En resumen, agradeció a quienes están al tanto de su condición y aseguró que no podría sentirse mejor.
«Muchas gracias por preocuparse y estar pendiente de mi salud. ¡Me siento demasiado bien, a veces me cuesta creer que tengo el virus! Estoy segura de que nuestro Señor está acá a mi lado, sentado dentro de mi corazón. Tengo la certeza que Él también está al lado de todos y cada uno de ustedes», comenzó diciendo.
De igual forma, destinó algunas palabras de esperanza en medio de la crisis sanitaria, y exhortó a que prevalezca la expectativa segura de un futuro mejor.
«No perdamos nunca nuestra fe. Jamás está de más una oración hecha con amor y con esperanza, así que sigamos rezando todos por la recuperación de los enfermos, por nuestro país, por el mundo entero, que atraviesa momentos tan difíciles por esta pandemia», expresó.
Por último, agradeció nuevamente a quienes, de una manera u otra, le han enviado mucho cariño y apoyo. Instó a la gente a que no se cansen de cuidarse y atender a los demás ante la emergencia de COVID-19.
«Esto pasará, pero solo juntos podemos lograrlo. ¡Dios y la Virgen bendigan sus hogares, su trabajo y su vida!», concluyó Sor María Rosa.
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