Redacción. Honduras cuenta con varios cineastas, pero cada uno tiene algo que lo hace único y que lo hace destacar ante los demás, uno de ellos es el hondureño Servio Tulio Mateo, que con sus producciones cinematográficas busca que las personas puedan capturar las luchas, sueños, aspiraciones y realidades que rodean a sus personajes.
Pero más que entretener a una audiencia, busca mostrar lo que el cine es, «un auténtico imperio de los sentidos, donde se ve, se oye y, en definitiva se sienta».
Servio Tulio Mateo es cineasta, comunicólogo y profesor universitario. Estudió Comunicación en Costa Rica y se especializó en Producción en Cuba.
El cineasta comentó a DIARIO TIEMPO que su formación académica le ha permitido desempeñarse como docente de la carrera de Comunicación en UNITEC y como productor independiente. A lo largo de su trayectoria ha realizado varios documentales, películas, largometrajes y cortometrajes.
A continuación la entrevista completa:
¿Quién es Servio Tulio Mateo?
Soy hondureño y he tenido la oportunidad de formarme profesionalmente en el extranjero, en el campo de cine. Estudié Cine y tengo una especialidad en Producción, pero además de ser cineasta y trabajar como productor, soy también profesor universitario. Hace 21 años doy clases en Unitec, dentro de la carrera de comunicación imparto clases que tienen que ver con guion, con cine y con producción audiovisual.
¿Cómo se describe como persona?
Me considero un apasionado del arte audiovisual y tengo la oportunidad de trabajar en eso que estudié, pero además formar a nuevas generaciones a través de las clases en la universidad.
¿Cómo nace su amor por el cine?
Mi acercamiento con el mundo audiovisual viene desde hace muchos años, cuando era niño.
Cuando se fundó Telecadena 7/4 hubo una productora que empezó a crear programas dirigidos al público infantil y me acuerdo que de niño me llamó mucho la atención ver en la televisión nacional niños participando en programas infantiles. Y en un momento dado, la productora convocó a un casting y yo lo dije a mis papás: «yo quiero, yo quiero hacer este casting».
Hice el casting y me agarraron. Durante varios años yo estuve participando en una serie de programas infantiles y juveniles; estuve varios años trabajando como conductor infantil. Ese fue mi primer acercamiento y a mí realmente me llamó mucho la atención el mundo de los medios de comunicación. Yo creo que esa experiencia que viví de niño me dejó sembrada esa semilla.
Ya cuando finalmente me tocó elegir una carrera universitaria, pues decidí estudiar comunicaciones, que es lo más cercano a lo que estaba buscando. Estudié una carrera relacionada con el arte cinematográfico, que está muy ligado al mundo de la comunicación.
¿Cuántos proyectos ha trabajado hasta ahora y cómo ha sido el camino para elaborar esas producciones?
En este momento me encuentro trabajando en mi tercer largometraje como productor. El primero fue un documental que se llama El Porvenir, cuenta la historia de un incendio en la cárcel de El Porvenir, en La Ceiba.
Luego -hace unos años- tuve la oportunidad de ser productor de una película centroamericana que se llama Días de Luz, donde estamos involucrados productores y directores de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. Una película donde buscamos crear un largometraje con la participación de 6 países de Centroamérica.
Con Días de Luz tuvimos la oportunidad de que fuera una película que representara a Honduras en los Premios Óscar.
Actualmente estamos en la etapa postproducción de una película documental que se llama Allá donde nace el sol, que estoy produciendo con apoyo del Instituto Mexicano de Cinematografía, el Instituto Hondureño de Cine y un fondo en el que Netflix también está involucrado.Allá donde nace el sol es un proyecto que estamos finalizando este año. Es un largometraje que nos ha tomado bastante tiempo de realizar.
A nivel de cortometraje he participado en muchos, en la universidad me ha tocado ser asesor académico de más de 60 cortometrajes.
¿Qué sintió cuando uno de sus trabajos fue elegido para representar a Honduras en los Óscar?
Cada autoridad propone una película que represente a su país, en el caso de Honduras, en ese año la autoridad encargada eligió la película Días de Luz, para que fuera la película que representara en los Óscar.
Al final formamos parte de una lista de más de 100 países, que eran las películas que las autoridades de cada país postularon. Luego viene la etapa de su selección, que es una lista corta, y a esa etapa no llegamos.
Sin embargo, poder decir que esta película estuvo postulada siempre es un orgullo. Se siente un orgullo y una satisfacción. Ojalá algún día, quizás sea yo u otro cineasta, logremos más filtros y poder estar compitiendo en las grandes ligas, no solo en los Óscar, sino también en los tantos festivales que hay en el mundo.
¿Cuál ha sido la producción que más le ha costado trabajar?
La película Días de Luz. Fue un reto enorme, porque fue la primera vez en Centroamérica que se intentaba hacer una película en donde estuvieron involucrados seis productores y seis directores de cada país de Centroamérica.
Un gran reto porque estábamos en seis países distintos, queriendo construir una película. Un reto que le agradezco a la vida porque aprendimos mucho haciéndolo y yo me llevo esa película como una experiencia grandiosa.
¿Tiene nuevos o futuros proyectos en mente?
Estoy empezando a preparar una película que tiene que ver con el peor accidente de aviación que ha ocurrido en Honduras: la línea TAN-SAHSA, que ocurrió el 21 de octubre de 1989.
Estoy en una etapa inicial, pero estoy seguro de que es un proyecto que me va a dar muchos retos… será un proyecto importante.
¿Qué lo inspira a crear esta nueva historia?
Es un hecho histórico que ocurrió en Honduras y es importante que los eventos históricos que hemos vivido como país también tengan su respaldo a nivel cinematográfico.
Ese accidente de aviación me toca muy personalmente, fallecieron dos familiares míos y uno sobrevivió. Entonces tengo un involucramiento muy cercano al accidente, porque lo viví siendo niño y porque sufrí la pérdida de dos familiares.
¿Qué lo hace único como cineasta hondureño?
Creo que lo que finalmente destaca a un cineasta de otro y que de alguna manera lo hace único son esas historias que a uno le mueven y quiere contar. En mi caso, las cosas que he hecho están muy ligadas a inquietudes muy personales.
Personalmente intento que los proyectos en lo que participe cuenten cosas que a lo mejor a nivel comercial no suelen ser de tanto interés, pero sí considero que son importantes para mí a nivel de obra artística y un aporte realmente artístico e intelectual. No sé si eso me diferencia de los demás, pero intento que los proyectos en lo que trabaje me muevan por dentro.
¿Puede un cineasta lograr el éxito en Honduras?
Pienso que sí. Yo creo que el éxito también está relacionado a que uno se dedique a aquello que lo hace feliz. Yo soy feliz trabajando en mis proyectos de cine, soy feliz impartiendo clases.
La felicidad no siempre va ligada a la parte económica, creo que el reto que tenemos los cineastas en este país, es realmente poder vivir plenamente de lo que querés hacer.
¿Cuál es su género cinematográfico favorito?
Realmente veo un poco de todo, películas de ficción, documentales, series de ficción, me encanta la animación. Me gusta un poco de todo. Creo que realmente me gusta ver historias interesantes, ya sea en películas o series.
Pero si tuviera que pensar en un dominado común, intento ver películas que de alguna manera me den algo y ese algo a veces va más allá del entrenamiento, películas que me hagan reír, sufrir, llorar.
¿Qué hace en su tiempo libre?
Cosas muy triviales, me encanta estar en mi casa, ver series. En mi cotidianidad nada fuera de lo común, salir con amigos, como todo mundo. La verdad es que cuando uno tiene que impartir clases y trabajar en sus proyectos, se tiene un tiempo muy limitado, pero cuando tengo tiempo libre, voy al cine, a comer o tomar algo.
¿Qué mensaje le daría a todos aquellos jóvenes que sueñan con ser cineasta?
Yo les recomendaría que busquen formarse profesionalmente, este arte implica formación académica. Aunque Honduras no cuenta con una carrera cine, sí hay carreras que tiene fuertes componentes audiovisuales, como la carrera de comunicación con énfasis en la producción audiovisual.
Entonces yo les diría a los jóvenes que no solo se necesitan las ganas, también se necesitan la formación artística, técnica y académica.