Redacción. Honduras es un país lleno de riqueza natural, turística e histórica, por lo que es necesario agendar una visita a los pueblos con encanto que existen, entre ellos San Nicolás, Santa Bárbara, un rinconcito lleno de sabor y tradición.
Ubicado a escasos 30 minutos de la cabecera departamental, San Nicolás ofrece a propios y extranjeros una experiencia única. Este pintoresco pueblito se caracteriza por sus rosquillas de cuajada, café y leyendas ancestrales.
Uno de los más importantes atractivos en el pueblo es el enorme y majestuoso árbol de anacahuite, ubicado en el parque central. Este monumento de la madre naturaleza, ofrece vivir un momento de calidez, bajo una cómoda sombra y el cantar de las aves.
Don Edas Pineda, director de la oficina de turismo de la Municipalidad de San Nicolás, detalló a Diario Tiempo «acá los ofrecimientos son variados, empezando por nuestro árbol de anacahuite en el parque central y otros dos que se pueden visitar. Además, tenemos El Mirador de La Cruz, las Cuevas del Masical y las fincas donde se está dando el café orgánico».
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VEA LA ENTEVISTA A EDAS PINEDA:
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Perfecto para disfrutar la Navidad
El funcionario municipal también destacó que durante la temporada de Navidad y fin de año, en la parte cultural, desarrollan múltiples actividades.
«Invitamos a la gente a que pueda venir sin ningún riesgo o problema. Aquí hay hoteles, comedores, restaurantes, y pueden estar de 3 a 4 días para que puedan disfrutar totalmente de lo que es San Nicolás», destacó.
El municipio, según expresa Pineda, cuenta con algunas leyendas antiguas y que se han venido relatando de generación en generación. Entre ellas, una relacionada a las Cuevas del Masical, donde se realizan «pactos con el diablo».
«Allí iba la persona y hacía su ritual y obtenía lo que pedía. Esa es una de las anécdotas y a San Nicolás no le ofende que se combine lo religioso con lo demoniaco, se podría decir», manifestó.
También, resaltó la producción de las rosquillas, el insigne del municipio, por el que se celebra un festival en agosto.
«La roquilla, emblemáticamente, se ha dado a conocer como una de las mejores y es a base de cuajada, queso y lleva el mejor tostado; al juntarla con el café, es lo mejor que puede haber», agregó.
El encargado del departamento de Turismo de San Nicolás llama a todos los hondureños a visitar el municipio, ya que podrán disfrutar de un agradable clima, inolvidables experiencias, rica comida y, sin duda, las mejores rosquillas del país.
