El joven equipo de Portugal dio una sorpresa que entraba en pocos cálculos y derrotó por 2-0 a Argentina en partido correspondiente a la primera fecha del grupo D del fútbol olímpico.
Paciencia y Pité, a los minutos 65 y 82, y en ambos casos con remates desde afuera del área, le dieron un merecido triunfo al conjunto dirigido por Rui Jorge en el estadio Engenhao de Río de Janeiro.
Ruidosamente apoyado por la parcialidad brasileña, Portugal había sido ampliamente superior en la primera mitad. Bien plantado en el campo, sus volantes se hicieron dueños de la pelota desde el inicio y casi monopolizaron su tenencia. Tomás manejaba los hilos, mientras que sus laderos, André y Sergio Oliveira, se mostraban siempre libres para recibir y tocar, dándole mucha fluidez al movimiento del equipo.
Le faltó entonces a los lusos contundencia y lucidez para concretar la superioridad frente a Rulli. El 1 argentino le ganó un mano a mano a Bruno Fernandes, quien un rato más tarde disparó desviado en buena posición, y Paciencia remató por encima del travesaño una buena volea desde adentro del área.
Argentina nunca estuvo cómoda en el campo en ese lapso del encuentro, El 4-2-3-1 dispuesto por el Vasco Jorge Olarticoechea se vio desbordado por la movilidad portuguesa y el equipo tuvo que conformarse con salir de contraataque. Sobre todo por la derecha, donde se movió José Luis Gómez, casi la única carta ofensiva del equipo.
A los 27, por fin, los albicelestes crearon peligro frente al arco de Bruno Varela. Gómez ganó el fondo de la cancha, Correa remató el centro atrás y el cruce de Edgar Ié salvó a los portugueses. Un cabezazo alto de Cuesta y una llegada del propio Gómez -lateral reconvertido en volante por derecha para esta ocasión- que estuvo a punto de convertirse en gol casi de casualidad (quiso controlar el pase de Espinoza y le salió un remate cruzado) completaron las escasas aproximaciones argentinas en esos 45 minutos iniciales.
El partido pareció cambiar de rumbo en el arranque del complemento. Iban 2 minutos cuando un muy buen pase de Gómez -siempre Gómez- le permitió a Calleri ganarle la espalda a Tobías y enfrentar a Bruno Varela, pero su suave toque sobre la cabeza del arquero encontró el travesaño en su camino.
Y como los portugueses mantuvieron el pulso, el ida y vuelta se hizo interesante. A los 51, Paciencia tirado a la derecha despachó un centro bajo al que Bruno Fernandes no llegó por milímetros, tal como le ocurrió a André apenas un minuto más tarde.
Hasta que a los 65 llegó el tanto que Portugal tanto buscaba. Bruno Fernandes ganó la cuerda por la izquierda, tiró el centro bien atrás y Paciencia, de muy buen partido, entendió el movimiento: retrocedió hasta más allá de la medialuna hasta donde nadie lo siguió, controló y su remate bajo entró junto al palo izquierdo de Rulli. 1-0.
Olarticoechea intentó torcer el rumbo a partir de los cambios. Pavón había entrado justo un par de minutos antes del gol luso, y Lo Celso (le bastaron 20 minutos para ser el jugador más claro de su equipo) hizo lo propio a los 71. Entonces el encuentro se abrió por completo. Bruno Varela le tapó el empate a Pavón y Rulli a Salvador de manera consecutiva, Argentina emparejó el dominio y el contraataque pasó a ser la herramienta preferida de Portugal.
Cada minuto que pasaba el conjunto luso se metía más atrás, y se podía pensar que el creciente empuje argentino podía darle la igualdad, pero ocurrió lo impensable. A los 82, Pité por derecha enganchó hacia adentro y le pegó de zurda desde unos 20 metros. Parecía fácil para Rulli, aunque incomprensiblemente la pelota se le escurrió entre las piernas y se transformó en el 2-0.
Golpe duro para Argentina en el arranque y gran envión para las aspiraciones de Portugal en el grupo D, en donde la victoria de Honduras sobre Argelia en el primer turno del día por 3-2 garantiza lucha hasta el final.
