Redacción. Un conmovedor acto de humanidad protagonizado por agentes de la Unidad Metropolitana de Prevención N.º 14 (UMEP-14) salvó la vida de un recién nacido que estaba abandonado en una zona vulnerable del barrio La Chilca, en Lepaterique, Francisco Morazán.
El bebé, en evidente estado de desprotección, fue encontrado por pobladores que se sorprendieron al verlo envuelto en una sábana amarilla con rojo. Una patrulla del 911 llegó y posteriormente, los uniformados de la Jefatura Municipal de Lepaterique no dudaron en intervenir de inmediato.
La situación de riesgo exigía una acción urgente, por lo que los policías trasladaron al lactante hacia una ambulancia para su traslado al Hospital Materno Infantil de Tegucigalpa.
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Un gesto de ternura en medio de la emergencia
Durante el procedimiento, destacó el gesto de la agente policial Isis Carrasco, quien brindó cuidados y atención al pequeño con ternura, asegurando su estabilidad mientras se realizaba el trasbordo. Su actitud recibió el aplauso por sus compañeros y refleja el compromiso humano que caracteriza a muchos miembros de la institución.
El menor ya se encuentra bajo observación médica y, según reportes preliminares, está recibiendo los cuidados necesarios. De acuerdo con las autoridades, el bebé pasará a custodia en la Secretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia (Senaf).
Este acto reafirma el compromiso de la Policía Nacional, a través de la UMEP-14, con la protección de los más vulnerables, demostrando que su labor va más allá del cumplimiento del deber. Es una muestra clara de que todavía existen gestos de esperanza y solidaridad que pueden cambiar una vida.
Lo sucedido ha generado reacciones inmediatas en redes sociales, donde algunas personas se conmovieron y felicitaron a los agentes. Sin embargo, muchos mostraron frustración por el cruel acto de la madre, por lo que pidieron una investigación precisa para localizar a la mujer responsable.
