Tegucigalpa, Honduras. Familiares de los jóvenes que murieron en las pruebas físicas realizadas el 11 de septiembre de 2022 en la Academia Nacional de Policía (ANAPO) llegaron este miércoles al Ministerio Público (MP) a clamar justicia para que los casos no queden en el olvido.
Este miércoles se lleva a cabo la ceremonia de graduación de los aspirantes que ingresaron a la ANAPO precisamente en septiembre del año pasado. Y en este contexto los familiares de los fallecidos llegaron al MP, pues casi 5 meses siguen sin tener respuestas.
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Los jóvenes que murieron tras las pruebas físicas son:
- Kevin Mejía Sánchez
- Jairo Martínez
- Ronald Martínez
Pronunciamiento
Los familiares, aglutinados en las afueras de la Fiscalía, y mediante un pronunciamiento clamaron a las autoridades que investiguen el caso.
«Esto es para el ministro de Seguridad, haciendo hincapié en las demandas de las familias», declaró la abogada de las familias.
«Señor Óscar Chinchilla, fiscal general; señor Ramón Sabillón, ministro de Seguridad; hoy debería ser un día de alegría para nuestras familias. Un día como hoy, nuestros hijos, esposos, padres, hermanos, estarían cumpliendo uno de sus sueños y se estarían graduando como oficiales de Policía de la ANAPO», reza el pronunciamiento leído por los familiares.
Asimismo, el documento señala que estos siguen en lucha y a la espera de respuestas. «Aquí estamos, demandando una solución y deducción de responsabilidades sobre los hechos acontecidos el 11 de septiembre del año pasado», agrega.
«Nosotros, en lugar de celebrar, estamos hoy condenando la impunidad e indiferencia que las instituciones han mostrado ante la muerte de nuestros seres queridos. Y estamos denunciando la perversa maniobra de las instituciones que comprar nuestras consciencias con un ascenso póstumo», agrega.
De acuerdo con lo leído, las autoridades dijeron a los familiares que se les iba a entregar el ascenso póstumo a las tres víctimas y luego una compensación económica a las familias.
«Señor ministro, señor fiscal, un cartón no nos va devolver a la vida a nuestros familiares y el dinero tampoco», recpondieron.
