COPÁN, HONDURAS. Sherill Yubissa Hernández Mancía, de 29 años de edad fue encontrada muerta ayer lunes en el interior de su apartamento. Este, situado en el Barrio El Calvario, zona occidental del país.
Las autoridades manifestaron este martes que el caso de Hernández Mancía, quien era jefe de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) en Copán, está en proceso de investigación.
Pues aunque en un inicio se dijo que se trataría de un suicidio, Medicina Forense del Ministerio Público (MP) asegura que hay varias inconsistencias. Se conoció que dichas observaciones requieren un minuciosa atención.
NOTA: Anteriormente se colocó una fotografía que no correspondía a la joven Sherill Hernández, agente de la ATIC, por lo cual Diario TIEMPO solicita disculpas y hace corrección de la imagen.
El cuerpo de la joven lo encontraron sus compañeros de trabajo. Lo anterior, cuando la fueron a buscar en su apartamento. Esto, debido a que no se había presentado a labores como normalmente lo hacía.
Se supo que la oficial tenía un disparo en la cabeza. En tanto, los encargados de la morgue manifestaron posteriormente a los medios de comunicación que se hizo un «mal proceso» de levantamiento tras el hallazgo de la agente. Pues afirman que no es correcto que la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) manejara el caso de su compañera de trabajo. Además, tampoco el levantamiento cadavérico se hizo en presencia de los miembros de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Según relataron los demás agentes de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), no escucharon ningún ruido o algo parecido a disparos en horas de la madrugada. Fue hasta en horas de la mañana cuando se movilizaron hacia su lugar de trabajo que notaron que Hernández Mancía no salía de su cuarto.
Por lo que se vieron obligados a forzar la puerta. Y fue en ese momento cuando la encontraron tirada en el suelo. Asimismo, con un charco de sangre a su alrededor. Medicina Forense comentó que la versión de los agentes de la ATIC no encaja con la lógica. Puesto que no creen que los uniformados no hayan escuchado el balazo estando tan cerca.
Por otro lado, el levantamiento por parte de quienes asistieron fue rápido y con rasgos de inexperiencia en este tipo de hechos.
NO SIGUIERON LOS PROTOCOLOS EN LEVANTAMIENTO
De momento el cuerpo de la oficial se encuentra en las instalaciones de la morgue en San Pedro Sula. Allí es donde se le realiza una profunda autopsia para determinar la forma de su muerte; es decir, si la mataron o si se quitó la vida.
