TEGUCIGALPA, HONDURAS. En la homilía de este domingo 1 de septiembre, la iglesia católica invitó a los presentes en la eucaristía a poder amar sin condiciones y recobrar la humildad.
El mensaje que envía el evangelio de hoy, aseguran los católicos, sigue siendo vigente porque la sociedad está obsesionada con conseguir el reconocimiento social y no el de Dios.
«Jesús propone unas relaciones humanas fundamentadas en la libertad, en la gratuidad y en el verdadero amor. Dios ama a todos sin excluir a nadie», señala el mensaje evangelístico.
En ese sentido, Jesús descalifica a quienes buscan ser los primeros y quieren prestigio, manifestó el presbítero Orbin David Morales, quien oficio la misa en la Catedral Metropolitana San Miguel Arcángel.
«El que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido», refiere el mensaje para la población este domingo.
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Hay un afán por ser destacados
Asimismo, la homilía de esta mañana incitó a todos los hondureños para que busquen agradar a Dios y no a los hombres. «Estamos olvidándonos de amar gratuitamente».
Además, el vicario de la catedral señaló que «no se trata de humillarse de una forma masoquista. Necesitamos asimilar el evangelio».
La admiración por los famosos y la competencia por alcanzar los mejores puestos provocan que las personas se olviden de Dios, indicó. «Hemos olvidado lo que es amar de forma gratuita. Solo sabemos prestar servicios remunerados», subrayó Morales.
Finalmente, Morales propone preocuparse por los más necesitados y guardar por la vida de las personas que viven en soledad.
«Necesitamos hacernos atentos ante la pobreza inmensa, creciente y vergonzosa de tantos pueblos hundidos en el hambre y la miseria. También de otro tipo de pobreza por la ausencia del amor. Como les pasa a tantas personas que viven en soledad, como los ancianos, enfermos, inmigrantes».
