COLÓN. Dos guardias de seguridad fueron asesinados la mañana de este lunes en la Aldea Panamá, sector de El Aguán en Trujillo, zona norte de Honduras.
Las víctimas han sido identificadas como: Santos Misael Guzmán Bautista, de 31 años de edad, más conocido como «Micha», originario y residente en Aldea Prieta, Tocoa, quien deja cuatro hijos menores de edad, mientras tanto, el segundo muerto es Juan Salazar Villeda, de 34 años de edad; se supo que ambos fueron hallados atados de pies y manos.
Información preliminar indica que los dos guardias estaban realizando unas inspecciones a bordo de una motocicleta en una finca de palma de la zona de nombre «El Remolino», cuando de repente, unos campesinos que quisieron invadir el lugar y ante la presencia de los uniformados, comenzaron a enfrentarse y en la lluvia de balas perecieron los guardias.
Tras ser alertados del hecho, llegaron hasta el lugar elementos de la Policía para acordonar el doble crimen e indagar quiénes o quiénes exactamente les dio muerte.
También se movilizó Medicina Forense del Ministerio Público (MP) para levantar el cuerpo en base a ley. Asimismo, se informó que en el enfrentamiento resultó herido el campesino de nombre Edgar Rodríguez, de 30 años de edad, quien está recuperándose en un centro asistencial.
ANTECEDENTE
En febrero de este año, con varios impactos de bala fueron hallados muertos dos guardias de seguridad. Esto, en una finca de palma aceitera cerca de la colonia Duarte de la aldea Amapa de El Progreso, Yoro. Los occisos fueron identificados como Julián Cabrera Vásquez y Óscar Ramón Rodríguez. Quienes estaban uno cerca del otro, presentando varias heridas de arma de fuego.
De acuerdo a autoridades policiales, los vigilantes andaban realizando un recorrido por la finca en una motocicleta. Cuando fueron interceptados por desconocidos que los despojaron de sus pertenencias personales. Así como de sus armas de reglamento, pues no las portaban al momento del reconocimiento.
No bastándoles con haberlos asaltado, les dispararon hasta acabar con su existencia. Pero antes de marcharse le prendieron fuego a la “moto” que conducían lo infortunados. En ese sentido, autoridades policiales no descartan que el doble crimen, haya sido cometido por miembros de un grupo delictivo que opera en la zona. Por lo que ya andaban tras su pista.
Por su parte, parientes de los ahora occisos dijeron que tenían un buen tiempo de estar laborando como guardias de seguridad en la finca de palma aceitera. Pero jamás pensaron que morirían de esa manera.
Noticia en desarrollo
