TEGUCIGALPA, HONDURAS. Once (11) personas, ligadas al clan de los hermanos Valle Valle, extraditados a Estados Unidos (EEUU) y acusados de delitos de narcotráfico, están compareciendo en juicio oral y público, en el caso denominado «Operación Redada».
La Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO) como parte acusadora y la defensa de estos ciudadanos participan de las audiencias.
Los encausados son:
- Amelia García
- Juan Carlos Rosales García
- Jorge Danilo Rosales García
- Juventino Rosales Mejía
- Bairon Javier Rosales García
- Hudaldina Guerra Bueso
- Karen Walkidia Moreno Chinchilla
- Darwin Orlando Ramos Díaz
- Digna Emérita Rosales García
- Lesly Sofía Espinoza Trigueños
- René Isaac López Maury
A los 11 ciudadanos se les acusa del delito de lavado de activos en contra de la economía del Estado de Honduras.
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De la misma manera, se acusa como coimputada en la causa a Tesla Danessa Ortega Valle, hija de Digna Valle Valle. A ella, hace tres semanas la favorecieron con un sobreseimiento definitivo tras una sentencia de amparo que emitió la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Ante esta determinación a favor de Ortega Valle, el Ministerio Público se pronunció en contra.
El juicio oral y público en contra de los capturados en la «Operación Redada» se ha venido postergando desde el año 2020, por la pandemia del COVID-19 y también por los recursos interpuestos por la defensa.
El caso y la participación
La Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN), el 22 de octubre del 2015 recibió una denuncia anónima. En ésta se comunicó que el ciudadano René López, quien fungía como agente inmobiliario y se dedicaba a la compra-venta de automóviles, tenía una relación con la organización de los Valle Valle.
Luego, el 11 de febrero del 2016, se recibió otra denuncia en la que se establecía que Jorge Danilo Rosales, René López y Darwin Ramos, se dedicaban a actividades relacionadas con el tráfico de drogas, trasladándola de Honduras a Guatemala.
Según la denuncia, estos ciudadanos usaban puntos ciegos para hacer los traslados entre ambos países y que gracias a las ganancias que les generaba la actividad ilícita, habían adquirido bienes e inmuebles. Entre ellos, un autolote de nombre «Neko», ubicado en Santa Rosa de Copán.
La tercer denuncia se recibió, según la DLCN, el 2 de junio del 2016 en la oficina regional de San Pedro Sula. En ésta se establecían las actividades de lavado de activos que realizaban los ya denunciados.
Operación Redada
Fue tras las denuncias y las investigaciones de parte de la DLCN y la FESCCO, que ejecutaron la «Operación Redada», el 13 de noviembre del 2017 y se ejecutaron las capturas.
Posteriormente, el 22 de enero de 2020 el Ministerio Público amplió el caso, poniendo en marcha la «Operación Redada II». Aquí se desarrolló el aseguramiento de bienes inmuebles, ya que no tenían justificación legal de su origen.