Alajuela, Costa Rica.- Este domingo se disputó la edición 19 de la cuadrangular en beneficio de la Asociación de Lucha contra el Cáncer Infantil y la Liga Deportiva Alajuelense, se dejó el trofeo por segundo año consecutivo.
Y en Alajuelense se percibe ilusión y los 90 Minutos por la Vida fueron otro ingrediente para aumentar ese anhelo de que el 2019 será su año.
Los manudos cumplieron diez torneos sin saborear el título de campeón nacional, algo con lo que esperan acabar en su centenario.
Por eso, aunque amistoso, los triunfos en el torneo de los 90 Minutos por la Vida le añade más esperanza.
El simbólico cetro se agrega a las refuerzos del equipo, sobre todo el de Esteban Alvardo, quien se convirtió en el fichaje bomba del Clausura.
La llegada de Henry Figueroa
También la llegada del defensor hondureño Henry Figueroa; pues representa una posibilidad de mejora en la zona más débil de Alajuelense.
Eso y las constantes promesas que llegan desde la dirigencia, emocionan a los aficionados con mejores frutos. Desde que empezaron el periodo de pretemporada su discurso ha ido dirigido hacia la celebración de los 100 años.
Pero ese festejo no estará completo si no lo redondean con campeonatos. Siendo así, les era necesario iniciar con el pie derecho.
Evidentemente la cuadrangular es apenas un abre bocas y no determina nada desde el punto meramente futbolístico, pero sí vuelve a dejar a los rojinegros satisfechos.
Desarrollo del juego
Sobre la gramilla Luis Diego Arnáez probó jóvenes como Elian Morales y Geancarlos Castro, también jugó Alvarado. Aunque apenas 15 minutos y se vieron destellos agradables del delantero Ariel Lassiter.
Ante Cartaginés (1-0) mostraron una alineación variada entre suplentes y titulares; mientras que contra Saprissa se lo tomaron “más serio” y fueron mayoría estelares.
La táctica les funcionó y le ganaron al archirrival con el mismo marcador, gracias a un gol de Jonathan Moya.
Ese clásico lo jugó casi como si se trata de un partido oficial, así se mostraron los dos equipos, aunque Saprissa lo hizo con un once menos experimentado.
La Liga cumplió sus expectativas, como también lo hizo la Asociación de Lucha contra el Cáncer Infantil, con 28.090 entradas vendidas y una recaudación total de ¢180 millones, entre boletos y colaboraciones mediante la mensajería de texto. Ese monto equivale a ¢50 millones más que el año anterior.
El Estadio Nacional lució prácticamente repleto y el público pudo observar en su mayoría partidos entretenidos.
También hubo sorpresas que mantuvieron a los espectadores emocionados
Sobre todo la presentación de la Banda Municipal de Acosta, que se llevó la mayoría de aplausos en la Joya de La Sabana.
Los músicos estuvieron el pasado primero de enero en Pasadena, California, durante el Desfiles de las Rosas. Su participación generó una ola de comentarios positivos y este domingo llevaron su talento para cerrar una tarde y noche que cumplió el objetivo principal: ayudar a los niños.
