Redacción. El Banco Central de Honduras (BCH) -en base al Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE)- detalló que la economía hondureña reflejó un positivo crecimiento de 5.1% en febrero de 2024.
Las medidas de política fiscal y monetaria adoptadas han permitido alcanzar una estabilidad macroeconómica, orientada a controlar la inflación. Así como mejorar las condiciones de acceso al crédito e ingresos de los hogares derivados de salarios y envíos de remesas familiares, lo que estimula la demanda interna de bienes y servicios.
Y a su vez, la mayor producción nacional al reflejarse un crecimiento de 5.1% solo en el mes de febrero y de 5.4% en forma interanual.
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El aumento en la intermediación financiera, seguros y fondos de pensiones está asociado a mayores ingresos por intereses recibidos de créditos. Principalmente, los destinados al consumo, comercio, agricultura y propiedad raíz. Incluyendo el alza en las comisiones por los servicios financieros prestados.
Comunicaciones y comercio
Las Telecomunicaciones reportaron un incremento en la demanda de servicios de internet fijo y móvil con conexión de banda ancha, tanto por el mayor número de usuarios como por el uso de las empresas informáticas.
El sector comercio incrementó las ventas de equipo de transporte, productos alimenticios, demanda de aparatos de radio, televisión y comunicación, según la actividad económica registrada por IMAE y compartida en el boletín de prensa del banco.
Construcción y manufactura
La Construcción Privada, por segundo mes consecutivo, continúa por la senda de crecimiento, en especial por las construcciones destinadas al sector comercial. Seguido de las ampliaciones de obras existentes y edificaciones de centros educativos. Particularmente, en las ciudades de Danlí, Villanueva, Puerto Cortés y El Progreso.
La variación positiva también le sigue a la industria manufacturera. En parte por la mayor demanda externa de insumos: arneses para la fabricación de automóviles, de productos textiles y pedidos de prendas de vestir. Sin dejar de lado la elaboración de bebidas, carnes y lácteos destinados a cubrir el consumo interno.
Los servicios de hoteles y restaurantes tampoco se quedaron atrás, ya que tuvieron un incremento por el consumo gracias a las compras en plataforma digitales. Paralelamente, el sector agrícola mantienen el mismo balance.