AFP. El Vaticano anunció el viernes que publicará la próxima semana su primer informe anual sobre la protección de menores en la Iglesia. Dicha solicitud del papa Francisco busca desarrollar la transparencia y la prevención en la lucha contra la pedocriminalidad.
La Comisión Pontificia para la Protección de Menores, órgano consultivo creado en 2014 por el papa argentino y objeto de críticas en el pasado, publicará este informe piloto el martes, el cual se pretende difundir anualmente, según un comunicado.
Presentado como un «primer paso», el texto «documenta los riesgos que persisten y los avances que se pueden lograr en los esfuerzos de la Iglesia por proteger a los niños y los adultos vulnerables», indicó la comisión, precisando que también incluya «recomendaciones específicas”.
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En abril de 2022, el líder de los 1,300 millones de católicos pidió a la comisión este informe para contar con información «fiable sobre lo que sucede y lo que debe cambiar», haciendo un llamado a un «nuevo comienzo».
En este sentido, miembros de la comisión encontraron durante su investigación «la falta de datos disponibles» sobre agresiones sexuales, declaró la jurista neerlandesa Maud De Boer Buquicchio, responsable de la redacción del informe.
Informe anual
El texto se divide en cuatro partes, que estudiarán los procedimientos en vigor en unas quince Iglesias locales en diferentes continentes. También dentro de la Curia romana, el gobierno central del Vaticano.
Los miembros de la comisión, nombrados directamente por el papa, son expertos religiosos y laicos en diversas áreas. Los ámbitos en los que se desempeñan tienen relación con la protección de personas, incluyendo derecho, educación, psicología, psiquiatría y derechos humanos.
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Integrada en 2022 en la Curia, esta instancia enfrenta varias críticas y registró varias renuncias. Hans Zollner, su miembro más influyente, dimitió en marzo de 2023, acusándola de tener problemas estructurales y de transparencia.
A pesar de las medidas adoptadas por el papa desde su elección en 2013, como el levantamiento del secreto pontificio o la obligación de informar sobre los casos, asociaciones de víctimas consideran que las acciones concretas para combatir este flagelo siguen siendo insuficientes.
