Tegucigalpa. Con una espectacular puesta en escena, Luli Pampín, la ídolo de muchos pequeños, se presentó ayer sábado en el Coliseum de Ingenieros en Tegucigalpa.
Acompañada de sus carismáticos colegas, la argentina apareció en la tarima con su característica vestimenta rosa y morada e inmediatamente puso a mover el esqueleto al público infantil presente.
El show comenzó aproximadamente a las 3:40 y se extendió hasta las 5:00 de la tarde.
Luli Pampín realizó varios juegos con los que los niños no dejaron de reír y gritar cada vez que ella se los pedía. «Muchas gracias por tanto amor», dijo la artista al ver a su fanaticada gritar de emoción.
Camino por la selva, A mi burro le duele la cabeza, Boca sana, Las huellas perdidas, El girasol, Como lo hace mi conejo, La mané, Congelados y Feliz cumpleaños fueron parte del repertorio que interpretó la famosa Lucía Pérez Gerardi en la capital.
Vea también: Precio de boletos para concierto de Romeo Santos en Tegucigalpa
Nunca dejen de soñar
En compañía de su cuerpo de baile de cuatro integrantes y los personajes de sus performances, Luli hizo gala de sus dotes como influencer infantil. En la parte final, con la bandera de Honduras en la mano, Luli agradeció el recibimiento excepcional que le dio Tegucigalpa.
Además, contó emocionada que en tarima estuvieron dos Luli, en alusión a que está en espera de su segundo bebé. Su gran mensaje fue: «Nunca dejen de soñar porque los sueños siempre se hacen realidad».
Tras finalizar una presentación impecable de unos 90 minutos sin pausa, Luli Pampín se acercó al área del público para despedirse de la manera más cariñosa.
Fueron muchos los pequeños que se acercaron, le dieron la mano, abrazaron y hasta tiraron besos a su artista favorita. Sin duda alguna, Luli Pampín cumplió el sueño de los más chiquitos hondureños.