Tegucigalpa, Honduras.- Los senadores estadounidenses, Ben Cardin y Tim Kaine, expusieron su preocupación por la violencia política en Honduras y los intentos del partido Libertad y Refundación (Libre) por consolidarse en el poder.
Cardin es el presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, mientras Kaine es presidente del Subcomité de Asuntos del Hemisferio Occidental. Ambos se suman al resto de funcionarios de EEUU que cuestionan la situación política de Honduras.
“Estamos profundamente preocupados por el intento del Partido Libre de consolidar el poder en Honduras. El nombramiento unilateral de un fiscal general interino y un fiscal general adjunto socava la confianza en las instituciones democráticas de Honduras, especialmente después de meses de negociación», expresaron.
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Agregaron que «los actos de violencia por parte de colectivos patrocinados por Libre contra miembros de la oposición en el Congreso son inaceptables. La violencia no resolverá esta crisis«.
En ese sentido, los senadores pidieron al oficialismo y a la oposición que aperturen los diálogos para encontrar los consensos y elegir en propiedad a un fiscal general y adjunto del Ministerio Público.
“Honduras necesita un fiscal general fuerte y capaz. Tal como lo hizo Estados Unidos en Guatemala y El Salvador cuando el poder se consolidó de manera inapropiada y la voluntad popular del pueblo se subvirtió. El presidente Biden debería estar listo para tomar acciones diplomáticas o económicas apropiadas si Honduras no cambia de rumbo. Se debe respetar la voz del pueblo hondureño”, concluyeron.
Gobierno acepta opiniones externas
El canciller hondureño, Enrique Reina, pidió a los senadores estadounidenses «respetar nuestra soberanía y dejar de mal informarse con la oposición, que es la que destruyó la institucionalidad con Juan Orlando Hernández».
Asimismo, este miércoles, Reina tras una reunión la embajadora de EEUU en Honduras, Laura Dogu, afirmó que las relaciones de Honduras con Estados Unidos «no eran de amistad, sino de súbditos», pero ahora las cosas han cambiado.
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«Lo que están buscando es generar crisis y desestabilización unidos a ciertos sectores externos que buscan desestabilizar el gobierno de la presidenta«, expresó.
Concluyó señalando que «somos estados soberanos, que mantenemos una relación digna. Habrá temas en los que vamos a estar de acuerdo y en otros que no, y esos los vamos a manifestar. Además, exigimos la misma relación de respeto a nuestra soberanía y actitudes como Estado».