Redacción.- En el mundo ya hubo más de 664 millones de casos de personas diagnosticadas con el COVID desde el inicio del brote que empezó en China a fines de 2019. En ese momento, el virus que causa la enfermedad era desconocido. Sin embargo, desde entonces se hicieron diferentes estudios que han permitido hacer incluso una vigilancia de su evolución.
En la Argentina, investigadores científicos que forman parte del consorcio Proyecto País, del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, desarrollaron un software con un algoritmo que permite detectar si una persona ha adquirido la infección con más de un coronavirus. Es decir, posibilita distinguir si una persona tiene diferentes variantes o sus diversos sublinajes.
Los investigadores desde 2020 empezaron a hacer secuenciación de genomas del coronavirus a partir de muestras de pacientes con COVID.
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“Desarrollamos un algoritmo que permite analizar la salida cruda de la secuenciación por una de las dos tecnologías. Posibilita determinar si en esa muestra se encuentra más de una forma del coronavirus SARS-CoV-2. Puede ser que sean dos virus del mismo linaje incluso o bien por supuesto virus de distinto linajes o variantes”, explicó a Infobae Carolina Torres. Ella es coautora del trabajo e investigadora en virología de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires y del Conicet
La investigación se publica en el número de febrero de la revista Virus Research. En el artículo, el equipo liderado por Mariana Viegas, del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, y Paula Aulicino, del Laboratorio de Biología Celular y Retrovirus, que forma parte de Hospital de Pediatría Garrahan, explicaron que la secuenciación genómica del coronavirus demostró ser fundamental para la detección y la respuesta a la pandemia.
Al hacer esa secuenciación, se consigue información valiosa sobre la biología y la evolución del virus. Según la base de datos GISAID, se han generado más de 13 millones de secuencias de longitud completa del coronavirus. Esa información permite monitorear en tiempo real la diversidad genómica del SARS-CoV-2 en todo el mundo.