Tegucigalpa.– El encargado de la seguridad del Estadio Nacional, Saúl Bueso, compartió que ellos habían aprobado que la barra del Olimpia entrara al estadio. Esta según para tenerlos en un solo lugar y organizados.
Saul Bueso Mazariegos, declaró que la Secretaria de Seguridad al cambiar los planes a última hora. Ya estaba definido que la barra contraria, en este caso Olimpia; entraría al estadio. El sábado se dictaminó lo contrario.
Los seguidores del club ‘merengue’ decidieron asistir al recinto deportivo como simples aficionados, y ahí estuvo el error según Mazariegos.
“Si los aficionados se hubiesen ubicado dentro sus cubículos correspondientes no hubiésemos tenidos tantos problemas, pero hubo una instrucción de última hora y eso nos desbarató el plan, porque teníamos planeado que la barra de Olimpia ingresara y eso nos hubiese permitido identificarlos y ubicarlos en su lugar”, mencionó Bueso.
Se planteó un mal esquema. La seguridad en el estadio no fue la mejor, esto como en partidos anteriores. Al estar tan dispersos, no se tenía un control de los mismos.
“Falló la estrategia de la seguridad porque los cubículos donde se ubican las barras están para eso, son barreras físicas que le permiten a la policía mantener un control de las barras, darles seguridad y manejar los tiempos de ingreso, estadía y salida, todas esas situaciones estaban previstas, pero a última hora surgió una instrucción que desbarato todo y nos generó ese gran problema”.
Cabe destacar la actuación de los elementos de seguridad, aunque sus acciones pudieron afectar a un estadio completo. “La policía actuó oportunamente y logró evitar el enfrentamiento entre las barras, aunque tuvo que recurrir a lanzar gases y eso no era parte del plan”, añadió.
No obstante, el pánico se apoderó de las personas que asistieron a disfrutar del derby capitalino. Según el encargado de seguridad toda la culpa recaería en la Secretaria de Seguridad.
“Nosotros vamos a informar. La Secretaría de Seguridad cambió el plan del ingreso de barras visitantes, estuvimos hablando con el jefe de la unidad y habíamos concluido que iban a ingresar las barras visitantes, pero a última hora se cambió el plan y nos desbarato todo. La policía es obediente y tuvo que hacer caso, corrimos muchos riesgos”, detalló Mazariegos.
Finalizó haciendo énfasis, en lo peligroso que son algunos objetos y las vengalas. Algunos de los jugadores o espectadores podrían salir lastimados. “Tenemos que revisar la seguridad, las bengalas ponen en riesgo la integridad de todos, hay que aplicar sanciones más fuertes porque la gente no está consciente de lo que puede provocar”.
