Símbolos curiosos como los de una serpiente haciendo referencia a una farmacia son detalles que a veces no notamos, pero que tienen historias muy interesantes.
El origen de este distintivo de las farmacias reside en la figura de Hermes, dios griego de la ciencia química. Recordemos que toda la farmacopea ha sido siempre química, muy ligada a su vez a la medicina.
Debido a que Hermes también era considerado como el mensajero de los dioses, se le representaba portando un báculo alado que en las farmacias ha sido sustituido por una copa.
Los antiguos griegos establecieron una relación entre los médicos y las serpientes, ya que estos ofidios renuevan periódicamente su piel y parecen rejuvenecer, algo que los helenos esperaban obtener de sus médicos. Es por ello que el báculo incorporó los dos serpientes enroscadas alrededor de él.
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Diosa griega representada como serpiente
Con respecto a la copa no se trata de una derivación ni del báculo alado de Hermes, ni del bastón de Asclepio o Esculapio. Se trata de otra divinidad: la diosa Higía, hija de Asclepio.
Esta diosa griega y romana, era considerada diosa de la curación, la limpieza, la salud y la higiene, palabra de la cual deriva su nombre.
Era representada como una mujer joven por cuyo cuerpo iba enroscada una serpiente que terminaba por dar su veneno en una vasija griega (no una copa) que la diosa tenía en su mano derecha. Así es que, se suprimió la imagen de la diosa y en lugar de la vasija griega pusieron una copa o cáliz.
Fuente: Culturizando
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