SUERTE
La canciller corrió con mejor suerte que el despido. Desde finales del año pasado la traían entre ceja y ceja y se querían deshacer de ella. Los rumores sobre su salida del Gabinete crecieron después de la trapeada que pegó con ella, en aquella asamblea de la OEA, su par venezolana. Ayer la confirmaron como nueva embajadora en los “Yunais”.
CONFIANZA
El que parece haber vuelto al círculo de confianza del hombre es Lizandro Rosales, quien será el sustituto de María Dolores Agüero en la Cancillería. El comisionado presidente de COPECO había caído en desgracia en el primer período del hombre, por andarse haciendo imagen, cuando estaba claro que el único que podría brillar es aquel que dijimos.
BONITO
Y hablando de confianza, la bulla en el Palacio es que el niño bonito es el ceibeño, Marco Antonio Midence, que desde el año pasado funge como comisionado para el cumplimiento de asuntos presidenciales (entiéndase mayordomo del despacho). Cuentan que el hombre no da un paso sin él y que hasta lo ve como posible “delfín”. ¿Lo estará preparando?
MANDADO
Cuáles reformas electorales ni que ocho cuartos. Ayer dijo MOH que en la agenda legislativa de Gracias no hay nada de eso incluido. Sólo van a occidente a hacer un mandado para el hombre, pues aprobarán proyectos para beneficiar a distintos sectores como maestros, productores y transportistas. Bueno, si es que los insurrectos los dejan.
CASUALIDAD
Cualquier coincidencia es pura casualidad. Los ASJ opinaron ayer igualito que algunos voceros del Partido Nacional. En una rueda de prensa dijeron que primero la ley y después el nombramiento de los miembros del Consejo Nacional Electoral (CNE). Nada de selección negociada para integrar los organismos electorales, opinaron.
