Redacción. Un grupo de pobladores de los bajos de Baracoa, Cortés, se ha tomado la carretera internacional CA-13 exigiendo la reparación de bordos y dragado de los ríos Ulúa y Chamelecón.
Desde horas de la madrugada de este jueves 10 de octubre, los pobladores mantienen bloqueados los dos carriles de la carretera que conecta Puerto Cortés con San Pedro Sula. «Nadie entra ni nadie sale de Puerto Cortés», gritan.
Como era de esperarse en la zona comenzó un congestionamiento vehicular. Según los manifestantes, desde hace años están pidiendo el apoyo de las autoridades y, ante la falta de respuesta, decidieron tomar medidas más drásticas.
«Esta es la última instancia a la que recurrimos, porque varias veces hemos pedido que nos ayuden y el gobierno central no da un presupuesto para trabajar los ríos y los bordos», comentaron, al mostrar su postura de no liberar la carretera hasta que las autoridades ofrezcan respuestas.
Cuestionan apoyo
Otro poblador dijo que ellos son conscientes que ahora por la temporada de lluvias es difícil hacer las obras que solicita, pero se «pueden hacer las reparaciones a partir de diciembre o en enero de 2025».
Asimismo, cuestionó que las autoridades le dan todo el apoyo a Tegucigalpa, Francisco Morazán, para reparar todo tipo de obras pero la zona norte no lo recibe por igual.
«Queremos que a principios del próximo año nos construyan los bordos y que nos aprueben un presupuesto, porque a Tegucigalpa sí le aprueban uno. ¿Por qué aquí no lo pueden hacer?», denunció uno de los protestantes.
En la toma estarían participando más de 50 personas y se advirtió que la misma podría ser indefinida y, en los «mejores de los casos» -como fue calificada por los mismos manifestantes, duraría todo el día de hoy.
Al lugar ya llegó la Policía Nacional y hasta ahora no se han involucrado. Pero algunas personas temen que los puedan quitar «por las malas» de la CA-13.
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Golpe a la economía
Este tramo carretero es una de las vías económicas más importantes del país debido al flujo de vehículos de carga que salen desde Puerto Cortés, el puerto de entrada y salida de la mayoría de las importaciones y exportaciones de Honduras.
El economista y jefe del departamento de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Henry Rodríguez, criticó la tardanza de las autoridades en resolver este tipo de situaciones, las que pueden perjudicar gravemente la economía de la zona norte.
Rodríguez agregó que implican mayores costos económicos en las actividades productivas del país, ya en que en el tráfico se encuentran carros que transportan productos que la población necesita para el consumo, así como materia prima que fábricas esperan para la producción.
«Ese tipo de eventos definitivamente causan atrasos en la economía porque paralizan a la población que se está movilizando. Atrasan las actividades productivas importantes y todo esto tiene un costo. Un costo en la producción, en el trabajo de las personas y en el consumo de combustible», manifestó
El economista dijo que «todo eso tiene un costo sobre la economía que no se calcula. Las autoridades deberían tomar medidas al respecto, ser más diligentes en este tipo de percances».
