Redacción. El hondureño Christian Jamil Suazo Sánchez saldría antes de lo previsto de la prisión, por haber colaborado con la Fiscalía de Estados Unidos para identificar a otras personas involucradas en actividades de narcotráfico.
La liberación de Suazo estaba programada para finales de 2026, pero mediante un acuerdo de negociación se le permitirá salir el 27 de octubre de 2025, lo que significa una reducción de más de dos años en su condena.
Christian Suazo fue condenado en el mes de octubre del 2022, a cinco años y nueve meses de prisión por lavado de activos y tráfico de drogas, tras declararse culpable ante la jueza Cecilia Altonaga, de la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York.
Desde el momento de su condena, el hondureño se ha mantenido en constante colaboración con fiscales estadounidenses, siendo pieza clave para revelar nombres de personajes hondureños implicados en el narcotráfico y lavado de dinero.
“El único factor que puede militar a favor de una reducción de la Regla 35(b) es la asistencia sustancial del acusado”, detallaban los documentos judiciales.
Asimismo, advertían que “el acusado queda bajo la custodia de la Oficina de Prisiones de los Estados Unidos y será encarcelado por un período de 47 meses”.
Vinculaciones de Christian Suazo con Fredy Mármol
Según documentos federales, Suazo Sánchez era socio del capo de la droga, Fredy Mármol, que a inicios de año fue condenado a 20 años de prisión, así como también de Kensy Torres, alias “La muñeca de la mafia”, condenada a tres años de reclusión en Estados Unidos.
“El acusado queda bajo la custodia de la Oficina de Prisiones de Estados Unidos para ser encarcelado por un término total de 71 meses (cinco años y nueve meses)”, señala la sentencia dictada por la jueza de Florida, Cecilia Altonaga.
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Sánchez era el encargado de coordinar las entregas de la mayor parte del efectivo y las transferencias electrónicas de esos fondos.
En octubre de 2019, el acusado se reunió con personas en Estados Unidos ligadas al narco para negociar un envío de cocaína de Colombia a Honduras, y discutir la logística de pagar las drogas con dólares provenientes de México.
