Redacción. La Red por la Defensa de la Democracia (RDD) ha denunciado enérgicamente las presiones políticas y ha exigido respeto irrestricto al calendario electoral.
Mediante un comunicado, la organización expresó que su anhelo se alinea con el deseo de diez millones de hondureños. «Queremos democracia, queremos elecciones y nos estamos preparando, como la ciudadanía activa y vigilante, para ejercer nuestro derecho al voto», afirmaron.
La RDD lamentó profundamente que ciertos sectores promuevan acciones que generan incertidumbre y buscan desestabilizar el proceso electoral, lo cual contradice la necesidad de un clima de estabilidad y confianza.
«Condenamos todo intento de presión, directa e indirecta, sobre los órganos electorales, especialmente en esta etapa crítica del calendario electoral«, resaltaron. La organización enfatizó que, en este momento, se requiere serenidad institucional, transparencia y respeto a la legalidad.
Comunicado de la Red por la Defensa de la Democracia (RDD).
Ministerio Público
La RDD exhortó al Ministerio Público (MP) a actuar con imparcialidad, responsabilidad y estricto apego al «interés superior de la democracia». Detallaron que cualquier acción que busque desestabilizar el proceso debe ser evitada.
«Recordamos que el rol del Ministerio Público debe ser el garante de la legalidad y la justicia, no el de un actor que incida negativamente en el desarrollo normal del proceso electoral», aseveraron.
La organización también recalcó su respaldo al Consejo Nacional Electoral(CNE), al que califican como la «máxima autoridad en la organización de los comicios». «Reafirmamos nuestro compromiso irrestricto de acompañar a las instituciones democráticas del país y de contribuir activamente a que las elecciones del 30 de noviembre se realicen de manera justa, transparente y sin interferencias», afirmaron.
La RDD comentó que Honduras merece una democracia sin miedo.
Finalmente, la RDD hizo un llamado a toda la ciudadanía a mantenerse alerta, vigilante y firme en la defensa de la democracia. «Honduras merece elecciones íntegras, sin amenazas, ni retrocesos. Honduras merece una democracia sin miedo».