El aterrador pasado de joven estrangulada en Chamelecón

La joven hondureña tuvo antes de mu muerte hechos que perjudicaron su estado emocional.

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Yésica del Carmen Cardona.

REDACCIÓN. «No ha sido fácil salir de casa, pero se que si Dios me permitió salir es por que tiene muchos propósitos para mi vida», fue uno de los últimos mensajes de Facebook de la joven Yésica del Carmen Cardona Sauceda, de 23 años de edad, hallada estrangulada en Chamelecón.

Cardona Sauceda era oriunda de Colonia Vida Nueva, Cofradía y sus familiares dijeron desconocer qué andaba haciendo  en la Colonia La Ceibita, Chamelecón, lugar donde fue encontrada con la correa de la cartera en su cuello.

Vecinos presumen que sujetos ingresaron a matarla pues la propiedad no tiene muro y los delincuentes entran con facilidad.

Al momento del hallazgo la ahora occisa vestía un pantalón negro, camisa azul y zapatos negros.

Debido a los acontecimientos que Cardona tuvo que vivir, pasó pidiendo a “gritos” ayuda por medio de su cuenta en el Facebook, pues solía escribir en su estado lo mal que la estaba pasando y las pocas ganas que tenía de seguir en este mundo.

“Me quiero morir”, publicó el pasado 27 de junio a través de la red social, donde personas hasta le colocaron “caritas enojadas”, como diciéndole que estaban contra lo que deseaba.

Joven asesinada.
Joven asesinada.

Una semana antes, escribió “si luego me voy de este mundo quiero que siempre me recuerden, principalmente mis amigos que han estado conmigo en las buenas y en las malas. Por un día voy anochecer, pero no voy amanecer”.

Ante esa situación, conocidos sugirieron que ella quería provocar su muerte, porque le hicieron ver que era un pecado que Dios no perdonaba y que mejor confiara en Él.

En varias ocasiones le solicitó al Creador que le quitara lo que tenía dentro de su corazón y que les diera fuerza para soportarlo.

“No ha sido fácil salir de casa, pero sé que si Dios me permitió hacerlo, es por que tiene muchos propósitos para mi vida”, fue el último mensaje que dio a conocer, lo que indica que estaba dispuesta a luchar para seguir viviendo; sin embargo, no lo logró, porque delincuentes le segaron la vida, en el solar de una vivienda.