SAN PEDRO SULA.- Empleado de BANHCAFE sufrió un aparatoso accidente en las cercanías del Estadio Nacional de Tegucigalpa.
Un irresponsable conductor de rapidito hizo caso omiso de una luz roja y como resultado embistió la camioneta de Ronald Zelaya, un empleado de BANHCAFE.
«Vengo bajando con el semáforo en verde cuando el conductor, irresponsablemente, se nos vino encima y por milagro de Dios estamos aquí», dijo Zelaya, visiblemente nervioso y sorprendido de haber salido ileso.
El Rapidito impactó a gran velocidad el lado del conductor, destartalando practicamente todo el lado izquierdo de la camioneta de Zelaya.
La camioneta es una Ford Expedition de lujo que, por fortuna para el empleado de BANHCAFE, cuenta con sistemas de seguridad modernos. De no ser por las bolsas de aire laterales, el conductor facilmente podría haber perdido la vida.
Si el rapidito hubiese impactado contra un carro de menor envergadura, no cabe duda que sus pasajeros hubieran resultado heridos de gravedad.
Por si cruzarse un semáforo en rojo no fuese suficiente irresponsabilidad, el conductor del Rapidito llevaba la unidad llena de pasajeros.
Dos menores de edad, un niño y una niña, que iban como pasajeros en la unidad de transporte, resultaron heridos y fue necesario trasladarlos a un Hospital para recibir atención médica.
Del lado de la camioneta, una señora que iba en el lado del pasajero tuvo que ser trasladada a una clínica privada puesto que, como explicó Zelaya, quedó con los nervios demasiado alterados tras el peligroso accidente.
Ronald Zelaya confirmó que físicamente la señora no sufrió ningún daño.
El conductor del Rapidito huyó de la escena del accidente. La parte frontal de la unidad sufrió daños considerables.
Si el conductor no es aprehendido, el dueño de la empresa de transporte tendrá que hacerse con los gastos del accidente una vez quede demostrada la versión de Ronald Zelaya.
