Redacción. Bélgica aprobó una nueva ley histórica que otorga a las y los trabajadores del sexo derechos laborales similares a los de otros empleos.
Esta legislación, la primera de su tipo en el mundo, garantiza a los trabajadores del sexo acceso a contratos oficiales, seguro médico, pensiones, baja por maternidad y enfermedad. Con esta medida, la prostitución pasa a ser considerada un trabajo regulado por el Estado, lo que representa un avance significativo en los derechos de este colectivo.
Sophie, una trabajadora sexual en Bélgica, expresó su satisfacción por la ley, señalando que ahora existirán como personas con derechos reconocidos.
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Trabajó embarazada
Del mismo recordó que en el pasado tuvo que trabajar incluso estando embarazada, mencionando que llegó a mantener relaciones sexuales con clientes sólo una semana antes de dar a luz. A pesar de que tras una cesárea le indicaron reposo, volvió al trabajo rápidamente porque no podía permitirse dejar de generar ingresos.
La prostitución fue despenalizada en Bélgica en 2022 y legalizada en varios países como Turquía y Perú. Sin embargo, este es el primer país en establecer derechos laborales formales para los trabajadores del sexo. Erin Kilbride, de Human Rights Watch, celebró la medida como un paso radical y positivo, instando a otros países a seguir el ejemplo.
Aunque algunos críticos argumentan que esta ley no resolverá problemas como la trata y la explotación sexual, muchas trabajadoras consideran que la medida era necesaria. La nueva legislación también regula a los proxenetas, quienes podrán operar legalmente bajo estrictas normativas.
Además, todas las habitaciones donde se ofrezcan servicios sexuales deberán contar con un botón de alarma conectado a una «persona de referencia» para garantizar la seguridad de las trabajadoras.