Atlántida, Honduras. Autoridades presentaron requerimiento fiscal contra Luis Fernando Triminio, fiscal auxiliar asignado al Centro Integrado (CEIN) de La Ceiba, por presunto delito de abuso en perjuicio de una joven.
Las investigaciones de los agentes establecen que detuvieron a una fémina el 18 de marzo de 2024, a eso de las 10:30 de la noche.
Al día siguiente, ella se encontraba en las instalaciones CEIN, específicamente en las oficinas de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
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Ahí estaba también el fiscal de turno, Luis Fernando Triminio, (ahora encausado), junto con los agentes de investigación ya que cumplía con su asignación de turno.
Aparentemente el fiscal le dijo a los policías que se retiraran porque le tomaría una declaración a la joven detenida. Seguidamente, la llevó hacia una oficina, cerró la puerta y le dijo que se sentara.
Después de eso, le pidió su celular y comenzó a revisarle sus fotografías, mientras le decía que ella era muy bonita.
El funcionario agregó su contacto en el celular de la víctima como «abogado Triminio» y le dijo que confiara en él, que se quedaría con su número para que tuvieran comunicación.
Acto seguido, el fiscal le habría preguntado «¿Qué estaría dispuesta a hacer por su libertad?».
Según el relato, el funcionario se le acercó, se sentó en la esquina del escritorio, le acarició los brazos, la besó en la boca y le insinuaba cosas.
Confesión de la fémina
«De acuerdo al testimonio brindado por la joven, el fiscal se dirigió hacia ella, le quitó la ropa y la abusó, mientras le decía que todo iba a estar bien», detalla el informe del Ministerio Público.
Cuando finalmente él la dejó salir de la oficina, aproximadamente a las dos de la mañana, un agente de la DPI la trasladó hacia la celda. Ahí, se encontraba una detenida, quien acogió a la víctima, que estaba desconsolada.
Posteriormente, a eso de las 9:00 de la mañana del 19 de marzo de 2024, cuando la retiran de la celda, nuevamente se acercó el fiscal Triminio.
Él ya se encontraba fuera de turno laboral, le entregó su celular apagado y le mencionó que su familia la estaba esperando.
Es ahí que la víctima le confesó a una tía lo que había ocurrido, sin embargo, por temor no mencionaron nada.
A eso a las 10:00 de la mañana de ese mismo día, le notificaron a la víctima de un auto de libertad otorgado a su favor por otro fiscal. Es en ese momento que ella le cuenta todo a las autoridades.