Redacción. Hollywood es sinónimo de glamour, lujo y celebridades, un lugar donde residen figuras icónicas del entretenimiento y personalidades influyentes. Entre sus colinas, se encuentran mansiones que no sólo destacan por su diseño arquitectónico, sino también por las historias que guardan entre sus muros.

Una de estas propiedades, ubicada en el prestigioso vecindario de Hollywood Hills, ha vuelto a ser el centro de atención: la enigmática residencia del 1895 Rising Glen Road. Con un precio actual de 17,995,000 de dólares, la mansión completamente renovada en 2024 combina lujo y modernidad en sus 9,400 pies cuadrados.

Cuenta con cinco amplias habitaciones, ocho baños y medio, y espacios diseñados para el máximo confort. Sin embargo, el atractivo de la propiedad no únicamente radica en su opulencia, también en su oscuro pasado que sigue intrigando a muchos.

La casa ha sido el hogar de algunas de las figuras más reconocidas de la industria del entretenimiento, incluyendo a Britney Spears y Brittany Murphy. Ambas dejaron una huella en la propiedad, aunque por razones muy diferentes, contribuyendo al aura de misterio que la rodea.

Britney Spears y los fenómenos sobrenaturales

Antes de que Brittany Murphy adquiriera la mansión en 2003, Britney Spears vivió en ella y experimentó eventos inquietantes. Según Julianne Kaye, ex maquilladora de Spears, la cantante comenzó a sentir presencias sobrenaturales después de una sesión de reiki.

En el pódcast We Need to Talk About Britney, Kaye relató cómo Spears sentía que algo intentaba empujarla por las escaleras, llevándola a abandonar la casa y mudarse a un hotel, sin volver nunca más.

Las tragedias de Brittany Murphy y Simon Monjack

En 2003, Brittany Murphy compró la mansión por 3.85 millones de dólares, pero su tiempo allí estuvo marcado por la tragedia. En diciembre de 2009, Murphy falleció inesperadamente en el baño de la residencia a los 32 años debido a neumonía, anemia y complicaciones por medicamentos.

Apenas cinco meses después, su esposo, Simon Monjack, murió en la misma casa, también por neumonía y anemia severa. Las muertes consecutivas despertaron rumores de moho tóxico en la propiedad, pero estas teorías fueron descartadas por el forense.

A pesar de ello, la trágica historia dejó una profunda cicatriz en la mansión, que la madre de Murphy vendió en 2011 por solo 2.7 millones de dólares, un precio muy por debajo de su valor de mercado.

Una nueva vida para la mansión  

Con el objetivo de borrar las sombras del pasado, los actuales propietarios realizaron una renovación completa de la propiedad en 2024, transformándola en una residencia de lujo contemporáneo. Desde los interiores rediseñados hasta los espacios exteriores cuidadosamente modernizados, la mansión ahora ofrece un estilo de vida sofisticado que combina comodidad y exclusividad.

Pero las historias que envuelven la casa siguen siendo un desafío. Aunque los agentes inmobiliarios destacan su diseño impecable y sus vistas impresionantes, muchos compradores potenciales no pueden ignorar el tétrico pasado de la residencia.

El legado de Brittany Murphy

Katie O’Grady, actriz y compañera de reparto de Murphy en su última película, Something Wicked, recordó en entrevistas cómo la actriz parecía frágil y debilitada en sus últimos días. Estas memorias, junto con la trágica historia de la mansión, han perpetuado el interés en la propiedad.

Pese a los esfuerzos por renovar y transformar la icónica casa de Hollywood Hills, sigue siendo más que una residencia de lujo: es un símbolo de las historias complejas y humanas que yacen bajo el brillo de Hollywood.