Redacción. Un niño migrante hondureño ha conmocionado a todos los internautas de redes sociales, luego de que se difundiera un video en el que brinda su triste testimonio sobre las dificultades que enfrentó en su camino para llegar a los Estados Unidos.
En una prédica desarrollada en una iglesia evangélica de los EE.UU, sin temor ni pena alguna, el pequeño Junior Daniel se paró en frente de la congregación y comenzó a relatar cómo Dios lo guardó y lo protegió en todo su camino.
«¡Dios les bendiga, hermanos, quien vive, y a su nombre, dele palmas a Dios! Mi nombre es Junior Daniel Mendoza Rosales, vengo llegando hace poco a este país, soy de Honduras, venía mal de salud, tuvimos que aguantar hambre», empezó diciendo el compatriota.
Testimonio de Junior Daniel
Luego de presentarse ante la congregación, el catracho comenzó a relatar la triste y agónica historia que tuvo que vivir junto a su familia, antes de entrar a EE.UU. en busca de mejores oportunidades de vida.
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«Estoy agradecido con el Señor, les voy a contar algo. En México me iban a deportar, y cuando iba a ser anotado, dije: ‘Dios, no me desampares’. Y adivinen qué, dijeron ‘pueden pasar’. Ustedes saben la alegría que yo sentí porque había alguien que no me abandonó en el momento más difícil», reveló Daniel.
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Como explicó el pequeño Daniel, entrar a EEUU en calidad de indocumentado es toda una travesía de la que no todos salen bien librados. Pero gracias a la ayuda de Dios, dijo el niño hondureño, él y su familia pudieron entrar sin ser deportados.
Finalizado, el compatriota confesó ante la congregación de esa iglesia: «Tú confía en Dios. Él nunca te va a abandonar. Él es el único que te comprende, te cuida y te ayuda a pasar todas las dificultades que puedes afrontar».
