Honduras. Varios miembros de una familia denunciaron ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ) en Tegucigalpa, a un hombre que, aseguran, está pidiendo 4 millones de lempiras por el hecho de haber estado casado con una mujer de esa familia.
En exclusiva para Hable Como Habla (HCH), la familia de dio a conocer el hecho.
Gloria María Argueta, madre de la afectada, manifestó que la expareja de su hija la está hostigando. Recalcó además que la cantidad de dinero que solicita no puede ser pagada; además, que nunca tuvo contrato laboral con él para que le exija «prestaciones».
La mujer perjudicada, en conjunto con organizaciones de mujeres, levantaron su voz frente a los tribunales y solicitan una conciliación en el caso.
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Otro caso, a nivel internacional
Las noticias en torno al pasado de Britney Spears no dejan de salir. Y es que la lucha por acabar la tutela que Jamie Spears ejerce sobre su hija, ha provocado que varios secretos salgan a la luz. Ahora fue el ex marido de la cantante, Jason Alexander, quien aseguró que su exsuegra se encargó de «eliminar» el matrimonio.
Todo ocurrió cuando el abogado experto en divorcios, Mark Goldberg, confirmó que fue Lynne Spears, madre de la artista, quien la obligó a anular su matrimonio y pedir el divorcio tras 55 horas de casados.
Y es que Britney Spears y Jason Alexander, amigos de infancia, dieron el sí en 2004 durante un breve viaje a Las Vegas. Pero, el matrimonio no prosperó y hoy se descubrió los verdaderos motivos que lo llevaron a su fracaso.
«Fue la madre, Lynne Spears, quien interfiriendo e insertándose en la vida de su hija, vino a Las Vegas, echó a Jason y le consiguió un pasaje de avión a casa», explicó Goldberg al diario Daily Mail.
De hecho, cuando pidió el divorcio, Britney Spears acusó que «no entendía sus acciones» con Jason Alexander, lo que llevó a que la princesa del pop fuera criticada por su comportamiento.
«Según recuerdo, fue idea de Britney casarse. Dijo que no habían estado bebiendo ni consumiendo drogas, ni menos borrachos», explicó el abogado de Jason Alexander, quien comentó que realmente se amaban.
