Honduras.- Cientos de migrantes venezolanos y de otras nacionalidades se han trasladado desde el oriente del país hasta Tegucigalpa, para asentarse en los alrededores del Congreso Nacional, ubicado en el centro de la capital.
Según lo que relatan a medios locales, los indocumentados deciden quedarse a dormir en los bajos del Poder Legislativo porque consideran que es menos peligroso, y no tienen dinero para pagar un hotel. Sin embargo, aclaran que su estadía es temporal, mientras logran reunir el dinero para seguir su ruta.
Uno de los entrevistados de nacionalidad venezolana, contó que lleva alrededor de diez días durmiendo en esa zona porque espera reunir dinero y seguir su camino hacia Estados Unidos. Al mismo tiempo, comentó que en el día ha logrado encontrar trabajo como albañil, pero no es suficiente para pagar un hotel.
De igual manera, una mujer veneca manifestó que en Honduras les han tratado bien y se encuentran en los bajos del Congreso Nacional mientras siguen su ruta, pero aclaró desconocer los días que piensan permanecer en el lugar.
No obstante, varios de los migrantes expresaron su preocupación debido a que la marcha convocada para mañana martes 29 de agosto por la presidenta Xiomara Castro, ya que sus simpatizantes planean llegar hasta el hemiciclo.
Por lo tanto, esperan encontrar un lugar para hacer espera mientras finaliza la movilización y no interferir o salir lastimados.
Nota relacionada: Hallan 125 migrantes, entre ellos hondureños, en carretera de Oaxaca
Avalancha de migrantes colapsa buses en Danlí en su ruta hacia EEUU
Colapsadas se encuentran las terminales de buses en Danlí, El Paraíso, debido a la gran cantidad de migrantes que han llegado en transito y cuyo destino son los Estados Unidos.
Medios de comunicación que han registrado el flujo migratorio, señalan que desde horas de la madrugada del pasado miércoles alrededor de mil personas han salido en buses amarillos desde Danlí hacia Tegucigalpa, capital del país.
La mayoría de los indocumentados son venezolanos, quienes relatan a los periodistas la difícil situación que viven en su país, misma por la cual deciden arriesgarse por mejores oportunidades.
“Ya no se puede vivir en mi país Venezuela, yo me vine con mis amigos, ya no se puede sustentar a la familia”, dijo un migrante.