No fueron días fáciles para Cristiano Ronaldo. Después de la consagración de Lionel Messi en la gala de entrega del Balón de Oro, algunos vándalos pintaron el número 10 y el nombre de la Pulga en la estatua que el portugués tiene en Madeira, su ciudad natal. Sin embargo, el delantero de Real Madrid no reaccionó ni se expresó al respecto. Sí lo hizo su hermana, Katia Aveiro, quien calificó a los agresores como «frustrados salvajes que merecerían vivir en Siria». Sus palabras desataron un revuelo en las redes sociales y por eso luego tuvo que retractarse y ofrecer las disculpas del caso.
Según Aveiro, sus palabras fueron manipuladas. Por eso, afirmó que no debía pedir disculpas por algo que no dijo, aunque luego aclaró que lo hizo por respeto a la gente de nacionalidad siria. «Entiendo que con mi comparación mucha gente se pudo sentir incómoda. Pero nunca quise hacer sentir mal a nadie. Soy impulsiva y reacciono por mis emociones», agregó.
Katia tiene 39 años y su perfil mediático no sólo tiene que ver con su parentesco con Cristiano Ronaldo, ya que también es una conocida cantante portuguesa que inició su carrera en el año 2005 con el curioso pseudónimo de «Ronalda». Su elevado número de seguidores en Twitter hizo que sus palabras tuvieran un importante efecto y por eso se vio obligada a pedir disculpas.
