TEGUCIGALPA. Luego de trascender que la joven Jenny Mariel Carias Carranza de 24 años de edad, falleciera a raíz de ver una miniserie “satánica”, uno de sus hermanos salió al paso a desvirtuar dicha versión.
En ese sentido, Antonio Carías, consanguíneo de Jenny aseguró que ella no pereció de esa manera. “No murió por un rito satánico, ella falleció a raíz de un infarto”, indicó el molesto hermano.
Además, criticó el tratamiento informativo que varios medios de comunicación le han dado a la noticia de la muerte de su hermana.
“Por este medio quiero aclarar que mi hermana Jenny Mariel Carias Carranza, no se suicidó; como manejan los medios mediocres de nuestro país (HCH y Radio Globo). Mismos que informan cualquier cosa, sin pensar el daño que ocasionan a las familias con tal de las noticias; sin antes cerciorarse de los hechos, basándose disque en lo que dijo el padre a una vecina”, posteó en sus redes sociales Antonio Carías.
Seguidamente, explicó que la ahora occisa murió producto de un infarto. “Mi hermana falleció de un infarto, no se colgó de una viga ni nada por el estilo. Ella expiró DE UN INFARTO, por lo cual pido respeto a su memoria”, puntualizó.
Finalmente, hizo una invitación a los familiares y amigos cercanos que los quieren acompañar al entierro.
“A todos los amigos o conocidos de Jenny que la quieran acompañar en su última morada aquí en la tierra; su sepelio será a las 2:00 de la tarde en el Cementerio Amor Eterno de la colonia La Era”, escribió en su Facebook el hermano de Jenny Carías.
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Presunta muerte de Jenny Carías
Según informe preliminar, el hecho sucedió el pasado miércoles alrededor de las 12 del mediodía en la capital de Honduras.
Carías, habitaba en la Colonia San Miguel de Tegucigalpa, desde hace días estaba pendiente de una serie televisiva. No obstante, en esta se ponía a prueba a los seguidores de la misma, a practicar un rito satánico.
Se conoció que ella estaba sola en su casa y supuestamente en el último capítulo de la serie se incitaba a que el televidente practicara una prueba final.
De esta forma, el reto constaba en ponerse una bolsa plástica en la cara y con un cronómetro contar cuántos segundos o minutos podría aguantar sin respirar. Según expertos, al mediodía la muchacha decidió hacer la prueba, la cual le costó la vida.
“La joven se puso una bolsa negra en la cabeza. Luego, se cubrió la cabeza con el plástico y le sobrevino un desvanecimiento que hizo que muriera al instante”. Señalan los expertos.
El medico de Medicina Forense explicó que por la falta de respiración la mujer sufrió una asfixia que finalmente le provocó la muerte, quedando inerte en su cuarto de habitación. Cabe señalar, que la joven era empleada de un centro asistencial.
